De Bilbao al Pirulí de Monelos pasando por el corazón de Londres

R. G. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

17 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Una vida de película. Su hijo, Peter, especialista en escenas de acción de filmes como los de James Bond («menos las dos últimas»), Harry Potter o Jason Burne lamenta no haberle puesto delante una cámara a Pedro Pedrero Alberdi: «Mi padre es de Gallarta (Bilbao); fue un niño evacuado a Inglaterra en 1937 a causa de la guerra. Tenía once años cuando le pusieron en un barco, con su hermano y su hermana». Lo cuenta en el tanatorio donde vela a su padre que fue incinerado en Feáns. Detalla el por qué de aquella evacuación: «A mi abuelo le habían encontrado con un hacha clavada en la espalda. Era socialista». Con 15 años Pedro empezó a trabajar repartiendo comida de la embajada americana en Londres. Acabó la guerra española, empezó la mundial y entró en la Marina Mercante, como camarero: «Anduvo recorriendo el mundo durante doce años. Tengo fotos de mi padre que parecen de película, como del Titanic». En 1958 compró una casa en Londres, aunque nunca pidió la nacionalidad británica. Al dejar de navegar trabajó en un hotel. Y en 1967 conoció a Josefina Zas Vila: «Mi madre se fue de jovencita para Londres. La familia tenía un bar en Monelos que se llamaba El Pirulí, muy famoso. Mi madre son cinco hermanos: uno se fue a navegar, otro a Venezuela y a Cuba de cocinero y acabó cocinando para Fidel Castro. Otro se fue para Inglaterra con mi madre, que empezó haciendo las habitaciones de un hotel. En 1967 entró a trabajar en el mismo hotel donde estaba mi padre, se conocieron, se casaron y yo nací en el 68», explica de la historia familiar. Luego Pedro se fue, como jefe de camareros, a otro hotel, el Park Tower, «al lado de los almacenes Harrods». Ahí estuvo hasta que se jubiló «y empleó a españoles, que son los mejores en hostelería». Luego presidió el Club de Jubilados en Londres y llevaba dos años en A Coruña, donde falleció días atrás.