El efecto Inditex transforma A Coruña

Javier Becerra
Javier becerra A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Un grupo de jóvenes coruñeses frente al Pull & Bear de la plaza de Lugo,  uno de los puntos en los que es más evidente el cambio
Un grupo de jóvenes coruñeses frente al Pull & Bear de la plaza de Lugo, uno de los puntos en los que es más evidente el cambio ANGEL MANSO

El gigante de la moda genera una oleada de modernidad que ha afectado totalmente a la economía y sociedad de la ciudad

25 sep 2017 . Actualizado a las 13:38 h.

De un tiempo a esta parte todos los caminos de A Coruña conducen a Inditex. ¿Por qué abren bares tan modernos sin parar? ¿Por qué las inmobiliarias colocan alquileres en los pisos del centro de manera instantánea? ¿Por qué hay hoteles que en invierno mantienen una buena ocupación? ¿Por qué por la calle se oye a tanta gente hablando en inglés? ¿Por qué hay empresas coruñesas vinculadas al llamado contract facturando millones de euros? ¿Por qué la gente viste como viste? Las preguntas se pueden alargar hasta el infinito. Las respuesta es siempre la misma: «Eso es por Inditex».

Sí, el gigante de la moda ha mutado totalmente la ciudad. «A Coruña es más moderna y más abierta. Se ha quitado el aire provinciano que podía tener», sostiene el economista Venancio Salcines. «Existe un capital humano tan importante ligado a esa empresa que genera un cambio en el modelo de vida», señala Félix Blánquez, director del departamento de Empresa da Facultade de Economía de la UDC. «La transformación de una zona como la plaza de Lugo, por ejemplo, es brutal, generando una cultura expresiva con mucha fuerza», apunta Ana Martínez, profesora titular de la UDC y experta en Zara.

Ambiente en la plaza de Lugo en un día de semana
Ambiente en la plaza de Lugo en un día de semana ANGEL MANSO

La empresa no facilita información segmentada de sus empleados en A Coruña y Arteixo, correa de transmisión de todos estos cambios. Se estima que en esa área trabajan en la firma unas 6.000 personas. De ellas, alrededor de 2.300 lo hacen en la central de Sabón. Sus salarios son muy superiores a la media. Resulta complicado establecer una media, al tratarse de relaciones muy individualizadas. Pero fácilmente se pueden encontrar sueldos por encima de los 3.000 euros. En muchos casos, superándolos ampliamente.

«En el grupo se ha generado un perfil de vanguardia que crea tendencias que se siguen en la ciudad»

Además, en la firma se busca un trabajador cualificado, que domina el inglés y sin problemas de movilidad. Es decir, se atrae a gente de mundo. «Se crea así un perfil de vanguardia que crea tendencias», explica Venancio Salcines. «Esa plantilla acaba viviendo aquí y relacionándose con la ciudad, demandando una serie de servicios que, poco a poco, se van ofertando», añade Félix Blánquez. Se trata de unos servicios anexos a un alto poder adquisitivo o experiencias reservadas antes a las grandes ciudades.

Terraza de la Urbana por la tarde
Terraza de la Urbana por la tarde ANGEL MANSO

Una revolución en la hostelería

El ejemplo más evidente se encuentra en la hostelería. «Ellos son los principales responsables de lo que ocurre», sostiene el profesor de la UDC. Cuando pinchó la burbuja inmobiliaria, en el 2008, se empezó a manifestar el cambio. Muchos parados optaron por los bares como sector refugio. La plantilla de Inditex, en aumento y ajena a los efectos de la crisis, se convirtió en objeto de deseo. ¿El resultado? Un bum de locales cuyo diseño se inspiraba en lo que se podía ver en las ciudades internacionales. Los que supuestamente gustaban a esa gente de mundo

«Eso es toda una revolución en A Coruña que parte de esa exigencia vinculada a Inditex», piensa Salcines. «¿Alguien se podía imaginar hace diez años la Franja y la Estrella así?», se pregunta el experto en moda Chema Paz Gago, autor de El octavo arte: la moda en la sociedad contemporánea. «Toda esa sofisticación responde a la existencia de un nuevo grupo social en la ciudad», responde.

Al margen de ello, existe una economía más oculta pero de una importancia mucho mayor. Salcines habla del sector contract y asegura que A Coruña es un líder mundial en ese terreno. Cita casos de empresas como Caamaño, Incoga o Aluman, vinculadas al equipamiento de tiendas del grupo en todo el mundo y con cientos de empleados. «Son empresas algo ocultas en la ciudad, pero muy visibles por ejemplo para los fondos de inversión internacionales». Pero además, la actividad de Inditex genera una cadena interminable de conexiones.

Bus de Inditex recogiendo a trabajadores y proveedores en el Hotel Hesperia de Juan Flórez
Bus de Inditex recogiendo a trabajadores y proveedores en el Hotel Hesperia de Juan Flórez MARCOS MÍGUEZ

En Juan Flórez, por ejemplo, se puede ver todas las mañanas a personas de todas la nacionalidades del mundo en el Hotel Hesperia. Esperan el bus de la empresa que los lleva a Sabón. En Alvedro chóferes de privados recogen a visitantes con el mismo destino. Son dos ejemplos de las decenas que se pueden encontrar.

 Otra forma de estar en la calle

En A Coruña, una ciudad con fama de buen vestir, las propuestas de Inditex encajaron a la perfección. En los últimos años el efecto resulta asombroso. «Llegas a Alvedro, vas al centro y ves una cultura expresiva importantísima totalmente ligada a esa empresa», apunta Ana Martínez. «La gente está muy orgullosa, le ha dado una gran identidad a la ciudad», añade. En ese sentido, la consultora y profesora de comunicación Olga Casal señala un punto concreto: «En la plaza de Lugo se concentra lo cool. La gente que tiene ese rasgo se manifiesta ahí». Gabardinas sobre los hombros. Bicicletas retro. Pantalones de chándal con zapatos de vestir. Gafas setenteras. Y, sobre todo, mucha actitud.

«Llegas a Alvedro, vas al centro y ves una cultura muy expresiva importantísima y a la gente muy orgullosa»

Al respecto, la periodista de moda responsable del blog Donkeycool Patricia García lo ve claro: «En los chicos el cambio es radical. Hace diez años ibas a Londres y veías una diferencia abismal en su modo de vestir. Ahora ya no. Hay más ganas de usar propuestas arriesgadas. Hoy he visto a una chica con unos zapatos de pelo. Antes eso no ocurría». ¿Por qué? La respuesta no puede ser otra: «Por Inditex».

Carlos Saavedra, fundador de Trison Worldwide
Carlos Saavedra, fundador de Trison Worldwide CESAR QUIAN

«No montaríamos este negocio si no existiera esto aquí»

El impacto es enorme: desde empresas que trabajan directamente para la firma textil a iniciativas que surgen en ese ambiente

Trison está considerada la quinta compañía más importante del mundo de equipamiento de imagen y sonido. Sada es su sede, pero su presencia llega a 88 países. ¿Cómo lo ha logrado? En una gran parte, gracias a equipar tiendas de Inditex. Suyas son esas grandes pantallas que deslumbran en Zara o Pull and Bear. «No seríamos la compañía que somos sin ellos», señala su fundador Carlos Saavedra.

«A Coruña es una ciudad muy especial precisamente por toda esa influencia. Eso se nota cuando la recorres y la vives» Contesta desde China, donde se encuentra por trabajo. «Nos han quitado los complejos, demostrando que podemos trabajar y ser competitivos en todo el mundo.Trison es hoy un operador-integrador, capaz de dar servicio en cualquier parte del mundo. Siempre digo que A Coruña es una ciudad muy especial precisamente por toda esa influencia. Eso se nota cuando la recorres y la vives. La oferta gastronómica, la moda en general, la estética de la gente y la ciudad».

Esa onda expansiva ha permeado en todo tipo de lugares, generando una economía con múltiples ramificaciones. Son pequeños negocios que han transformado la fisonomía de la ciudad. Un caso claro se encuentra en la zona de las plazas de la Cormelana y José Sellier (entre San Andrés y el Orzán). En el último lustro ha brotado una hostelería puntera con sitios como La Urbana o La Mar Salada. Los ecos llegan a la restauración. En el Barlovento o La Herculina, por ejemplo, se aprecia el sello de esos nuevos aires.

Uno de los camareros del Barlovento, un local de estética hispter, en plena faena
Uno de los camareros del Barlovento, un local de estética hispter, en plena faena MARCOS MÍGUEZ

Joaquín Vázquez, responsable de los dos últimos, lo tiene claro: «Un local como el Barlovento -basado en la hamburguesa gourmet y que parece un almacén convertido en restaurante con muebles de otra era- no lo hubiéramos abierto si no existiese esta mentalidad abierta. Hace diez años ni te lo planteabas». El hostelero cuenta cómo son las noches de semana: «Te puedes encontrar una mesa con personas de seis nacionalidades diferentes». De hecho, siempre tiene que estar disponible un camarero que hable inglés.

Le ocurre lo mismo, en un sector muy diferente, a la inmobiliaria Engel & Völkers. Negociar un alquiler en inglés se encuentra a la orden del día. Lo afirma el socio director Álvaro Rodríguez. Donde se percibe el empuje de Inditex nítidamente es en los pisos céntricos. Muchos de los trabajadores de la firma que vienen de fuera demandan exactamente eso. «Ahora alquilas en 24 horas. Si te gusta te tienes que decidir a la primera, porque después ya estará cogido», indica.

El bum de los conciertos

Los programadores miran hacia A Coruña. Aquí venden más entradas. Lo atribuyen al ambiente generado por Inditex. Profesionales de fuera dicen que en A Coruña existe una especie de nueva clase social perfecta para sus acciones. En el terreno también se palpa. Carlos Landeira, que trabaja para el Playa Club y la sala Finisterrae, pone un ejemplo: «Nos ofrecieron a The Vaccines un lunes. Nos decían colegas de fuera que cómo hacíamos algo así en una fecha tan mala, que iba a ser un desastre. Llenamos el Finisterre. Eso en otro lugar de Galicia no ocurriría». Aunque últimamente esté cogiendo fuerza el trap en el indie es donde más se nota. De hecho, el 11 de octubre abrirá el INN Club, una sala que programará este tipo de música. Su responsable, Luis Diz, es tajante: «No montaríamos este negocio si no existiese esto aquí».

Los destellos de este clima aparecen por todos los lados. En el Almacén Concept Store, abierto en el bajo contiguo a la Droguería Villar, se entremezcla hostelería, cosmética nicho, moda y arte. ¿La inspiración? «Locales de Londres y del Soho de Nueva York», contesta David Gigirey. «Teníamos claro que tenía que ser en A Coruña por tal y como es la ciudad actualmente».

João Assunção del taller Bicivintage dedicado a las bicicletas antiguas
João Assunção del taller Bicivintage dedicado a las bicicletas antiguas marcos miguez

Otro ejemplo se halla en Bicivintage, en el Orzán. El portugués João Assunção se dedica a restaurar bicicletas antiguas, todo un símbolo hipster. «Hay público para eso. Este año he notado un gran crecimiento», dice. Muestra una en reparación. Se trata de la que luce en Mamá Chicó, otro local hostelero totalmente en la onda Inditex. Como se puede comprobar, todo está conectado.