«Confundimos las glorietas con intersecciones de circulación giratoria»

FErnando Molezún A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

23 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las rotondas siguen siendo esos puntos de la red viaria donde cada uno aplica su particular régimen de circulación, lo que suele traducirse en accidentes que se producen con demasiada asiduidad. Esto evidencia el desconocimiento de la inmensa mayoría sobre cómo se debe circular por ellas. Desconocimiento que empieza en la misma denominación de este tipo de plazas circulares: «El término correcto sería el de glorietas, siempre y cuando tenga anillos cerrados, es decir, que la señalización horizontal no indique otra cosa que no sea circular alrededor. En caso contrario estaríamos ante una intersección de circulación giratoria, cosa que confundimos frecuentemente», explica Silvia Vázquez, directora de la Autoescuela Oza, que ayer hizo de profesora para todos los oyentes de Radio Voz al recorrer en directo en el programa Voces de A Coruña puntos críticos como la glorieta de A Pasaje -que es en efecto una glorieta- o la del pavo real -que es, sin embargo, una intersección de circulación giratoria-.

La regla básica en las primeras es la de que quien circula por el carril exterior siempre tendrá preferencia, de modo que si uno va por el carril izquierdo y quiere salir de la glorieta deberá ceder a quien venga por la derecha, cambiar de carril y después coger la salida, «nunca salir directamente desde el carril interior», advierte la especialista.

Pero las intersecciones de circulación giratoria que tienen una señalización horizontal distinta son otra cuestión. Por ejemplo, en el pavo real, bajando desde ronda de Outeiro en sentido Los Rosales: «Si circulo por el carril central con la intención de desviarme para coger la tercera ronda me encuentro con que las marcas de la calzada me obligan a seguir de frente hacia Los Rosales. Si siguiese girando estaría atravesando un carril, de modo que si me diese un golpe con otro vehículo la culpa sería mía» matiza Silvia Vázquez.

La clave principal para distinguirlas y saber qué hacer en cada caso la da la profesora: «Siempre hay que ir pendiente de la señalización horizontal y, por supuesto, obedecerla», concluyó ayer en Radio Voz.