Roberto Costas: «La Ciudad Vieja es una joya y hay que darle más valor»

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

CESAR QUIAN

El presidente de la delegación coruñesa del Colegio de Arquitectos de Galicia (COAG) cree que el modelo de limitación de tráfico puede ser el de Vitoria, Pontevedra o Santiago

17 mar 2018 . Actualizado a las 11:31 h.

Cree que la peatonalización es una oportunidad, que permitirá redescubrir la Ciudad Vieja de otra manera y que nadie querrá ver un coche después de probarla. Pero Roberto Costas, presidente de la delegación coruñesa del Colexio de Arquitectos de Galicia (COAG), también cree necesario acometer inversiones en esa zona de la ciudad para contribuir a dinamizarla.

-¿Cuál ha de ser el modelo de peatonalización? ¿Con acceso libre a residentes o más duro?

-Permitir el acceso a los residentes es necesario. La ciudad es para que se viva, que se habite. No se trata de eliminar ese coche del vecino que lleva a sus niños al colegio, o va a la compra, o tiene que desplazar a sus padres. Debe permitirse ese acceso y el reparto en horas controladas.

-¿Cuál es el mejor sistema de control de tráfico en una peatonalización?

-La operativa de control tampoco es lo esencial. De lo que se trata es de que una parte de la ciudad reviva. Se trata de atraer gente, de que haya más comercio.

-¿Qué efecto tendrá la eliminación de los coches?

-No conocemos realmente lo que tenemos, lo descubriremos sin coches y dentro de poco todos querremos irnos a vivir allí. La Ciudad Vieja es una joya que tenemos en A Coruña y hay que darle más valor.

-¿Y qué más necesita además de la retirada de los vehículos?

-Pues habría que renovar la urbanización de las calles, eliminar las aceras que aún hay, el cableado aéreo. Hay que hacer que sea más del peatón. ¿Hay ruinas? Sí, pero será un proceso lento. En cuanto la zona vaya ganando calidad se irá arreglando.

-¿Cómo se puede incentivar allí la recuperación de edificios?

-Tiene que haber ayudas públicas para no correr el riesgo de la gentrificación [un concepto que define la sustitución de los habitantes de una zona por otros de mayor poder adquisitivo]. A veces se espera a que el particular arregle, pero para eso muchas veces hacen falta ayudas, porque no queremos un modelo de ciudad de apartamentos turísticos, hay que tener cuidado con eso: no hay que esperar a que el mercado dicte cómo tiene que se la ciudad.

-¿Hay algún modelo a seguir?

-Lo de Betanzos [la Xunta está comprando allí inmuebles para rehabilitarlos] podría funcionar, pero además hay que invertir en rehabilitación del espacio público, que hace mucho que no se toca.

-¿Y en lo tocante a la peatonalización?

-El espejo en el que hay que mirarse es el de ciudades como Pontevedra, Santiago o Vitoria. El objetivo de una ciudad es que sus vecinos vivan cómodamente en ella, y allí los vecinos no quieren volver otra vez al coche después de su experiencia.

-¿Será fácil la adaptación?

-Al principio cuesta y hay reticencias, sin embargo después todo mejora. El hándicap del vehículo privado es difícil de pasar, porque aún tenemos costumbres del siglo pasado. Tenemos que ir hacia el transporte público, la bicicleta.

-¿Puede jugar la ubicación de la Ciudad Vieja en contra de su revitalización, al no estar en el centro de la urbe?

-En Santiago el centro es el casco histórico y el resto, periferia, aquí se desplazó hacia el Ensanche. La Ciudad Vieja no será zona de paso, no tendrá esa vida, pero por eso habrá que dinamizar, y conseguir que no haya solo pisos como una ciudad dormitorio, sino también negocios.