El Eusebio da Guarda se queda sin chuches

A CORUÑA CIUDAD

MARCOS MÍGUEZ

Esher Rey, que lleva tres décadas vendiendo golosinas en la gran isleta de la plaza de Pontevedra, dice que se jubila y alquila el local, pero los alumnos del instituto le piden que no se vaya

18 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta semana Esther pegó un cartel de «se alquila por jubilación», en el escaparate de su tienda. Los clientes, alumnos en su mayoría del Eusebio da Guarda, le dicen «no te vayas». «Me hacen llorar. Pero son 30 años aquí y me quiero jubilar», comenta con lágrimas en los ojos Esther Rey Magán. Varias generaciones de estudiantes del instituto disfrutaron de las chuches de esta mujer siempre sonriente. Pero existe una esperanza para que la plaza de Pontevedra no se quedé sin punto de venta de gominolas. «Yo voy a estar hasta que alguien me lo alquile. Y supongo que la persona que se haga cargo lo seguirá dedicando a lo mismo porque aquí ya tiene la clientela hecha», comenta desde este pequeño local situado al lado de la cafetería Manhattan. Desde la puerta se ve la paloma de Picasso y la entrada del centro educativo donde estudió el genial pintor. Entre la plaza y la tienda Gusy pasan cada día miles de coches y autobuses. «Trabajaba en el hostal Maycar y le dije al conserje si me buscaba un nombre para la tienda que iba a abrir. Al día siguiente cuando me vio me dijo lo de Gusy, y se lo puse», relata Esther, soltera «y sin compromiso, ni hijos», y madridista «hasta la médula». En las paredes del local hay varios pósteres del equipo blanco. Y eso que es un lugar de parada obligada de cantidad de deportivistas. «Sí, porque cuando hay fútbol en Riazor abro», apunta. Que el Eusebio da Guarda se quede sin chuches dependerá de que alguien dé continuidad a este negocio pionero que lleva treinta años endulzando a los niños coruñeses. Esther da varios consejos al que pueda estar interesado. «Hay que dejar los problemas fuera. Se trata de sonreír y tener paciencia con los críos, las mamás y las abuelas», sentencia esta mujer, siempre fiel a Radio Voz y a la sonrisa.