Jorge Fernández, que en los noventa se había apartado del foco totalmente, decidió retomar el mítico grupo coruñés de una manera inesperada
21 feb 2020 . Actualizado a las 10:09 h.Ha sido la noticia de la semana en la burbuja musical coruñesa: Viuda Gómez e Hijos anunciaba que volvía a los escenarios. Jorge Fernández, el cantante, compositor y guitarrista que en los noventa se había apartado del foco totalmente, decidió retomar el proyecto hace meses. Se puso en contacto con varios de los músicos originales. Se metieron en el local de ensayo. Y prepararon un retorno que va insuflar nostálgica emoción a muchos de los que vivieron aquella Coruña de los ochenta donde, cuentan, todo era libertad y diversión. «En serio, aquello era tremendo. Todo el mundo que venía aquí se quedaba impresionado. Te lo digo yo, que viví también la movida de Vigo o Madrid», comenta Jorge. ¿Será que nos los pasábamos tan bien en A Coruña que no necesitamos venderlo a los de fuera? «Pues puede ser», se ríe.
El retorno, como tantos otros que se produjeron de históricos del rock coruñés, cogió a muchos desprevenidos. Cualquiera que tenga relación con el mundo de la música en la ciudad habrá visto el ajetreo montado en las redes sociales con la noticia. Normal, Viuda Gómez e Hijos era el último gran grupo de los ochenta que quedaba por resucitar. Para dar el gustazo a todos los que fueron fans en aquellos días de efervescencia, rock de importación, chupas repletas de chapas y juerga hasta el amanecer. También a los que, por edad, no pudieron disfrutarlos y desean acercarse al grupo que se lo pudo comer todo y terminó por desvanecerse, dejando la aureola del mito.
Ellos fueron la respuestas coruñesa a Siniestro Total. Si los de Vigo tiraban a los Sex Pistols en sus inicios, los de Viuda eran devotos de Dead Kennedys. Irreverentes, graciosos y deslenguados, en su primera etapa apostaron por el punk gritón y acelerado. Se puede comprobar en el doble single que lanzó El Beasto con el título La viuda está de vuelta, que recoge maquetas del año 1983. Después evolucionaron a un power-pop de trazo más claro que alcanzó su cénit con la celebérrima Solución suicida, en 1987. Aún hoy acelera corazones cuando suena por sorpresa en algún local de copas. Como ha ocurrido tantas veces, cuando todo estaba listo para el éxito mirando a Madrid la cosa se torció hasta la disolución.
Ahora Viuda vuelve. De verdad y no en el sentido figurado del citado single. E igual que ocurrió con los retornos de Los Eskizos, Radio Océano, Os Diplomáticos de Monte Alto, Cacahué, Las Mandrágoras o Mac n’ Rones que se han visto en estos años, se añade una pieza al puzle musical (y sentimental) de la ciudad. Mientras ya se especula sobre quién será el siguiente (¿Kozmic Muffin? ¿High Time? ¿Elephant Band?), todos nos preparamos para verlos en el escenario. Y vibrar.
