Afectados por la reducción de trenes entre A Coruña y Santiago: «Ahora gasto más de la mitad de mi sueldo en ir en coche»

Manuel de la Chica, T. S. A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Fran Brea

Renfe asegura que los trenes «se irán incrementando conforme aumente la demanda»

08 jul 2020 . Actualizado a las 20:18 h.

María Fernanda Candal vive en A Coruña y trabaja en Santiago desde el 2007. Durante estos 13 años ha hecho siempre el mismo trayecto: coge uno de los trenes que salen a primera hora de la mañana desde A Coruña y, al acabar su jornada retorna desde la capital gallega a las 14.44 o 15.10 horas. Pero desde que se declaró el estado de alarma su rutina se ha visto alterada. Esos trenes ya no pasan. «En Renfe nos dijeron que con la vuelta a la normalidad se reactivarían los mismos horarios, pero de momento nada», se queja Candal.

«Llevamos tres meses y pico que ya no podemos más», explica Candal, que ha visto cómo en las últimas semanas se han ido añadiendo otros horarios del tren a media mañana o por la tarde, pero sin que haya noticias sobre los trenes que utilizaba para volver de trabajar. Esto ha provocado que deje de desplazarse en tren y tenga que coger el coche. «Antes gastaba ciento y pico euros en desplazamientos, pero ahora gasto cerca de 500. Trabajar en Santiago en este momento se está volviendo misión imposible», sentencia.

Como ella, otros muchos trabajadores se han visto perjudicados por este cese en los trenes de mediodía. Elena Martínez lleva haciendo ese mismo recorrido desde hace tres años. Ella trabaja a media jornada y asegura que, «por motivos familiares, me resulta imposible esperar hasta las 16.10 horas para coger el siguiente tren». Martínez dice que ahora gasta más de la mitad de su sueldo en gasolina y peajes. «Medio sueldo se va en el coche», sentencia.

«Ya no sabemos qué hacer», dice. «Por teléfono desistí, porque siempre nos dicen que nos dirijamos a la página web. Y ahí nos dicen que enviemos un correo electrónico, pero o no contestan o nos mandan un copia-pega». En ese mensaje, Renfe explica que se irán recuperando todos los horarios de los trayectos en función de la demanda, pero «no queda muy claro el criterio de cómo miden esa demanda», asegura esta usuaria.

La explicación de Renfe

Fuentes de la compañía ferroviaria han confirmado que «son conscientes de que hay gente afectada por la cancelación de los trenes que utilizaban de manera habitual». Sin embargo, explican que la reimplantación que se está haciendo de los horarios es «global», es decir, intentan «cubrir todo el territorio y atendiendo a los trayectos con más demanda».

En lo que respecta a estos trenes, desde Renfe aseguran que, «al no estar al 100%, se están intentando recuperar, de forma paulatina, todas las frecuencias». Además, dicen que la demanda se está mirando a nivel autonómico y que este junio la demanda de trenes de media distancia fue del 36 % con respecto a la del mismo mes del 2019. «Esto quiere decir que estamos muy lejos todavía de mover a los viajeros que teníamos antes de la pandemia», explican estas fuentes.

Por otro lado, destacan que Galicia fue la primera comunidad en recuperar en incrementar los servicios tras el estado de alarma, con nuevos horarios desde el 15 de junio (con seis trenes más), el 22 (12 nuevos trenes) y 26 de junio (otros 6 trenes).

Hartos de poner quejas

Pablo Ferreiro era uno de los habituales en el tren de regreso a las 14.44 horas entre Santiago y A Coruña hasta la declaración del estado de alarma. O en el de las 15.10 horas si salían algo más tarde de trabajar. «Eran dos trenes que venían cargados», asegura. «Cuando me he quejado, me dicen que recuperarán los horarios con más demanda, pero no tenemos forma de pedir ese tren en concreto».

Como María Fernanda Candal y Elena Martínez, él también se ha visto obligado a coger el coche para ir a trabajar, lo que le ha supuesto «un trayecto más largo, tener menos tiempo, gastar más dinero y muchas molestias». «Si no pueden poner todos los trenes, solo pedimos que cambien algunos de los que vayan más vacíos por alguno de hora punta», explica.

Jacobo Caeiro, sanitario, dice que «el 90% de los días cogía esos trenes e iban llenos». Cuando algún día salía tarde de trabajar o cogía otros trenes, «solo había 20 personas».

Cuando se suspendieron por el estado de alarma, empezó a ir en coche con su pareja, que también trabaja en Santiago. «Tengo muchos compañeros con los que también podría compartir el viaje en coche, pero al final siempre alguno tiene guardia y el resto tendríamos que esperar. La otra opción es coger el tren de las 16.10, pero eso supondría más gastos en comida y llegar a las 5 de la tarde a A Coruña, lo que te altera un poco la tarde». «La única forma para que compensara ir en coche sería que fuésemos cuatro personas en el mismo vehículo, pero eso es muy difícil de cuadrar», sentencia.