La Mora y seis miembros de su clan, citados por tercera vez a juicio en A Coruña por la redada en las casas de San José de hace más de seis años

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Redada al clan de la Mora en las casas de San José el 20 de noviembre del 2018
Redada al clan de la Mora en las casas de San José el 20 de noviembre del 2018 Marcos Míguez

La matriarca, su marido y tres de sus hijos se enfrentan a penas de hasta 17 años de cárcel por pertenencia a grupo criminal y traficar con droga utilizando a uno de sus nietos y su pareja, menores de edad

17 abr 2025 . Actualizado a las 14:32 h.

Por tercera vez en el último año, parte del clan de la Mora —incluida la matriarca, su marido y tres de sus hijos— están citados en la Audiencia Provincial de A Coruña para responder por los presuntos delitos destapados a raíz de la redada practicada hace más de seis años, el 20 de noviembre del 2018, en las ya desaparecidas casas de San José. Aquel día, un amplio operativo policial registró cinco de las viviendas y se incautó de diversas cantidades de distintas drogas, desde marihuana a heroína, dos armas de fuego y más de 5.000 euros en billetes. 

El juicio, previsto para este martes 22 de abril y que durará tres días, ya fue suspendido en dos ocasiones anteriores. La primera hace ahora un año por diferencias entre las defensas y la Fiscalía. Estaba previsto llegar a un acuerdo de conformidad y parecía que las negociaciones estaban ya avanzadas, pero en el último momento el procedimiento no estaba completamente preparado para continuar con el proceso, lo que obligó a aplazar la vista. Volvió a señalarse para siete meses después, para el 20 de noviembre del 2024, pero de nuevo se suspendió al renunciar el abogado de la defensa, junto al procurador, de cuatro de los siete procesados.   

El martes próximo, si nada se tuerce, los siete se sentarán en el banquillo, acusados de pertenencia a grupo criminal y de un delito contra la salud pública por traficar con sustancias que causan grave daño y, además, hacerlo utilizando a dos menores de la propia familia para llevar a cabo la venta y distribución de estupefacientes en el poblado. 

El clan de la Mora es un viejo conocido de las fuerzas del orden. De hecho, apenas dos semanas antes de la última vez que fueron convocados a juicio por esta causa, el 6 de noviembre del 2024, fueron detenidos hasta diez miembros de la misma banda —no se descarta que entre ellos estuviese alguno de los que será juzgado la próxima semana—, en una operación policial en la calle Touriñana, en Meicende (Arteixo) que desarticuló el narcoedificio al que trasladaron sus operaciones en enero del 2022, cuando las casas de San José fueron demolidas por el Ayuntamiento.  

 En el escrito de acusación para el juicio del próximo martes, el fiscal reclama que se le imponga a los siete procesados una condena de un año de prisión por pertenecer a banda criminal, y otros nueve años y una multa de 40.000 euros por delitos que causan grave daño a la salud pública a la Mora, su marido y dos de sus hijos. A mayores, tres de los acusados. entre ellos otro vástago y el yerno, se enfrentan a penas de siete años más y 30.000 euros por la utilización de los menores para el trapicheo. 

Imagen de la redada policial realizadada en noviembre del 2018 en las casas de San José, en A Coruña, con la detención del clan de la Mora
Imagen de la redada policial realizadada en noviembre del 2018 en las casas de San José, en A Coruña, con la detención del clan de la Mora MARCOS MÍGUEZ

El ministerio público señala que desde septiembre del año 2017 las fuerzas de seguridad realizaron una vigilancia constante en el lugar de San José al tener constancia de que existía un punto negro de venta de droga en cinco casas. Cada uno de los miembros del clan asumía diferentes funciones. Así, la Mora organizaba la recepción y venta de los estupefacientes, mientras que dos de sus hijos eran los que trataban con los toxicómanos que se acercaban a comprarla «permitiéndoles o no el paso». La otra hija encausada y su pareja, que no vivían en el poblado, «serían los encargados de transportar la droga y meterla en las casas», lugar al que llegaban «conduciendo un Audi A4 propiedad de otro de los hijos» de la matriarca, indica el fiscal. Además, también eran los responsables de retirar el dinero de la recaudación diaria que conseguían con el trapicheo.

Entre el 8 de enero del 2018 y el 25 de septiembre de ese mismo año, la policía levantó 34 actas de denuncia por incautación de sustancias estupefacientes a los clientes que acudían al poblado para hacerse con heroína (22 casos), cocaína (7) o ambas (5). Además, los agentes comprobaron que numerosos compradores consumían antes de salir de las propias viviendas, muchos de ellos precisamente en el interior del inmueble en el que estaba empadronada la Mora.

El ministerio público subraya que  las vigilancias «también pusieron de manifiesto que los acusados, con pleno conocimiento, empleaban entonces a dos menores de edad» para sus actividades ilícitas. Uno de ellos es nieto de la Mora e hijo de una de las procesadas, y el otro su pareja. Entonces, tenían 17 años. Ambos residían en otro de los inmuebles del poblado y «realizaban vigilancias, de manera constante, mientras los toxicómanos adquirían las sustancias», sostiene Fiscalía, que también resalta que eran los menores los encargados tanto de recoger la droga que trasladaban en Audi al poblado, como de entregar el dinero obtenido con la venta cuando venían a buscarlo.  

Fruto de la investigación se autorizó la entrada y registro en las viviendas, en donde los agentes encontraron diversas cantidades en cogollos y plantas de marihuana, cannabis, cocaína, heroína, metadona, varias básculas, numerosas papelinas, además de dos escopetas de aire comprimido. En casa de la Mora encontraron 5.155 euros en billetes y en la vivienda de la hija fuera del poblado hallaron importantes cantidades de droga, fundamentalmente cocaína y heroína, cuyo valor en el mercado se calculó superaría los 6.000 euros.

Cuatro de los acusados que serán juzgados la semana que viene, los padres y dos de los hijos, cuentan con antecedentes penales computables por reincidencia. Tres de ellos, la Mora, su hija y la pareja de esta, ya estuvieron en prisión provisional por esta causa desde el día de la detención el 23 de noviembre del 2018 hasta mediados del 2019, tiempo que ahora se les descontará de las penas a las que finalmente sean condenados.