La novela de la generación «indie»

Javier Becerra
javier becerra REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

ENIGMÁTICA. La autora «que reside en una aldea gallega» se esconde, por ahora, bajo el seudónimo Gala de Meira.
ENIGMÁTICA. La autora «que reside en una aldea gallega» se esconde, por ahora, bajo el seudónimo Gala de Meira.

«La entusiasta» relata el desencanto de una «groupie» de los festivales y pretende recoger el espíritu de un ambiente marcado por la música, el cinismo y la frivolidad

30 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Camerinos de festivales. Felicidad artificial. Gente guapa. Sexo de usar y tirar. Ropa pop. Frivolidad. Y mucho cinismo esparcido en garitos musicales. La entusiasta (Dos Manos), debut literario de Gala de Meira (seudónimo de una profesional de la comunicación gallega), surge como un relato crudo de la era indie en la primera década de este siglo. «Es una novela costumbrista de cosas reales y otras de ficción», adelanta la autora. De entrada, lo deja claro: «Yo he sido una groupie, mal que me pese decirlo. Hay que hacer las paces con una misma».

En su libro la protagonista (que no tiene nombre «porque cualquiera puede ser ella») también es una groupie, esa fan que sigue a los músicos con el afán de tener relaciones con ellos. En un momento dado dice: «Mientras tuviese algún disco publicado iba a empezar a darme igual al lado de quién me levantase». Detrás de ese comportamiento autómata laten una serie de conflictos personales que derivan en ese comportamiento obsesivo. Se trata del lado más profundo de la novela: «La groupie es una figura menospreciada por mujeres y por hombres. En el libro quería coger esa figura desde su punto de vista y tratar de entenderla», explica la escritora. La pulsión es clara. Pero se difumina a lo etéreo: «Hay un amor a la música muy fuerte. Tanto que se convierte en una obsesión que no se llega a entender». ¿Una adoración a la música muta en algo físico que no puede controlar? «Yo he tenido relaciones basadas en mi amor por la creación de esa persona, no por la persona», confiesa. «Llegar a esa persona es casi poseer la canción. Esa sensación la he tenido. Es más que un fan. La groupie se la juega», añade.

En La entusiasta una joven de una aldea gallega sufre el revés de la muerte de su hermano. Se va a estudiar a Madrid llena de inseguridades y melancolía. Su prima Adri —carismática, con dinero y resolutiva? le abre las puertas del mundillo indie del 2006. A partir de ahí se suceden peripecias en festivales como el FIB, el Easy Pop o el Contemporánea. Noches de éxtasis en locales como el Nasti u Ocho y Medio. Contactos con grupos de nombre ficticio —Solaris, La Troya, Ártico— que el lector ávido podrá conectar con los reales. Y todo ello regado de química euforizante. «Siendo amor por mi entorno», dice describiendo lo que la cocaína hace en su cerebro.

En un universo tan superficial, la apariencia lo es todo. Y, fiel a ello, el relato en primera persona hace descripciones rápidas y conclusivas. «Flequillo mod, pantalones pitillo y calcetines de topos», dice de uno. «Una chica magnética de pelo naranja y botas de estampado marroquí», señala de otra. La creadora lo conecta con Kiko Amat, uno de sus escritores de referencia. Sirve para confrontar a la chica con sus complejos: «Ella viene de una aldea de Galicia y quiere formar parte del ambiente con su ropa de Zara con la que se cree moderna. Allí, sin embargo, se compara con las chicas que se compran la ropa en tiendas de Fuencarral».

Mención especial merece el sexo, recogiendo en pisos y camerinos prácticas en las que la entusiasta se somete siempre a los deseos de los músicos. «La mayoría de las relaciones sexuales que salen en el libro son superpatriarcales y casi abusivas —opina—. Eso pasaba así. Unos dirían que como ella era una groupie lo iba buscando. Cada cual que saque sus conclusiones, pero esto sucedía. Y pasaba con gente que se considera feminista a día de hoy. Pasaba porque todos los permitíamos. En el indie había una falsedad tremenda».

Presentaciones

La novela —que pide en cada una de sus líneas una serie («¡ojalá fuera así!», exclama)— será presentada el 11 de diciembre en Madrid (Fotomatón); el 15, en Ourense (Librería Eixo); el 16, en Santiago (Cronopios); y el 18, en A Coruña (La Teresina). En las sesiones, la autora revelará su identidad.