Cristina Araújo gana el Premio Tusquets con «Mira a esa chica», una novela sobre una violación grupal

G. Novás REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

Cristina Araujo
Cristina Araujo .

22 sep 2022 . Actualizado a las 09:03 h.

Cristina Araújo Gámir (Madrid, 1980) ganó por unanimidad en la 18.ª edición del Premio Tusquets con su primera novela, Mira a esa chica, una obra «deslumbrante, adictiva, necesaria, sobre una experiencia dramática al final de la adolescencia de una chica», según el jurado presidido por Antonio Orejudo e integrado por Sara Mesa, Eva Cosculluela, Marta Barrio —triunfadora en la anterior convocatoria— y el editor Juan Cerezo. La propia Mesa elogiaba la narración en cuanto, dijo, alcanza «una gran hondura psicológica, precisa, excelentemente construida, y disecciona con fina inteligencia los entresijos del pensamiento patriarcal, al que se atreve a mirar de frente en toda su complejidad». Araújo se impuso entre los 736 manuscritos presentados al certamen —galardón que comporta una estatuilla de bronce diseñada por Joaquín Camps, 18.000 euros y la publicación en la colección Andanzas, el 19 de octubre— con la historia de una joven víctima de una violación grupal, que muestra al lector a través de diferentes puntos de vista con la idea de «reflejar la complejidad de los dilemas que afectan a todos los seres humanos». «Cuando leo, lo que más me interesa de las novelas —anota Cristina Araújo Gámir— es la introspección y la psicología de los personajes, sentirse reflejado en emociones y sentimientos recónditos que en ocasiones ocultamos por considerarlos sórdidos o inapropiados, pero que son, en realidad, universales». Con este libro, prosigue, quería exponer a los personajes a una situación extrema, y «analizar el modo en que la protagonista se va enfrentando, una por una, a las consecuencias inesperadas de una agresión sexual, y también las reacciones de la gente de su entorno, que le otorgan al trauma distintos niveles de gravedad».