El análisis de Nacho Rama: A Coruña sigue queriendo baloncesto pese al difícil paso por la Liga Endesa
DEPORTES

Aun tras el duro final de temporada que sufrió el Leyma Básquet Coruña, la masa social sigue mostrando su apoyo incondicional al proyecto naranja
03 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Hacer valoraciones ahora, con la temporada recién concluida, me parece muy resultadista y, sinceramente, creo que no deberíamos señalar culpables porque es seguro que todo el mundo puso todo de su parte para evitarlo.
Evidentemente, en un equipo donde todos tienen su importancia, hay que asumir éxitos y fracasos como tal, como un equipo. Se han dado unas circunstancias que terminaron con una tormenta perfecta entre diciembre y enero, que le pasó factura al Leyma Básquet Coruña y provocó el ir a remolque desde ese momento, con el desenlace final que todos conocemos.
Días atrás, aproveché este periódico para hacer pública mi gratitud como aficionado hacia el club, la directiva, el cuerpo técnico, los jugadores y los empleados, porque cada domingo veíamos nuestra camiseta en la mejor liga nacional de Europa. Eran muchos años los que se había trabajado para conseguirlo.
El FUTURo
No hay una fórmula mágica para regresar a la Liga Endesa
Jugar a ser pitoniso se me da muy mal y, además, no disponemos de una bóla mágica para adivinar el futuro. Sí parece, sin embargo, que se pueden dar, al menos, dos escenarios.
Por un lado, un cambio radical, con un entrenador nuevo y una reconstrucción de la plantilla casi en su totalidad, para lo cual se necesitará paciencia, pues un equipo ganador no se crea de la noche a la mañana. Fichar jugadores con cierto caché no es más que tenerlos en nómina. Conjuntarlos, definir sus roles e ir creciendo como equipo necesitará tiempo, algo que parece incompatible con las prisas que tiene el club por rebotar. Estas ansias serán mayores cuanto mayor sea el presupuesto del que se disponga, pues lleva adherida casi una obligatoriedad. Ejemplos mil encontramos en la historia de la Primera FEB.
el banquillo
La continuidad de Diego Epifanio todavía es una incógnita
Sigo pensando que cuando se hizo la reflexión y se ejecutó la renovación del entrenador por dos temporadas, conscientes del porcentaje que existía de descenso, era porque era una decisión ganadora: si nos mantenemos en la Liga Endesa, es un éxito que hay que premiar; y si descendemos, tenemos a uno de los mejores entrenadores de la Primera FEB, que ya ha demostrado su valía en el día a día.
Varios de los nuevos directivos no han vivido esa etapa y les ha tocado la otra cara de la moneda, pero es parte del aprendizaje que también deben asumir como protagonistas. Deportivamente, podría decir que, como aficionado desde la grada, por momentos discrepo de la decisiones tácticas que se toman en los partidos, o esa ponderacion del baloncesto ofensivo por encima de lo defensivo, o que si juega este jugador más que el otro.
Pero ahí quiero llegar. Desde la grada, con un conocimiento muy limitado de por qué pasan las cosas, nos atrevemos a enjuiciar, cada uno de nosotros con un criterio distinto en función de nuestros valores.
Lo que sí creo es que Epi es un gran constructor de proyectos, dejando muy claro el rol y la importancia de cada integrante en ir a muerte con una idea, y eso es lo que necesitan ahora. Alguien que conozca la idiosincrasia del club. Está claro que la exigencia de la competición —las derrotas— ha desgastado los lazos, pues hace dudar en lo emocional, pero una vez bajadas las pulsaciones debemos entrar en la parte racional y conocer lo bueno y lo malo del que está a su lado. Todo ello acelera ese proceso de adaptación.
Se podría dar una situación rocambolesca, que sería que los naranjas tuvieran que hacer un desembolso para indemnizar a Epi, y que este sea el entrenador de un futuro rival del Leyma en las posibilidades de ascenso. Poner en el mercado a un entrenador contrastado y reforzar a un rival directo cuando le tienes que pagar es osado.
Hay que tener mucha seguridad de que no encaja en el proyecto, pues se podría convertir en un búmeran. Por mi parte, en mi matriz de decisión creo que, deportivamente, la mejor opción sigue siendo Epifanio, y lo mismo con la parcela económica. Socialmente sí puedo entender las dudas.
la masa social
El apoyo de la gente, la mejor noticia de la temporada
La magnitud que ha tomado el club con ese subidón de seguidores hace que se magnifiquen las cosas buenas y las cosas malas y, por lo tanto, que la repercusión social sea mas elevada. Sin embargo, los que toman las decisiones deben buscar la mejor determinación en base a los criterios que se marquen.
Está claro que en esta última etapa se ha incorporado una gran masa social —diría por encima del 60 % de la afición— que ha visto perder muchos partidos al equipo y que seguía de lejos las evoluciones del equipo en el pasado, por lo que su opinión evidentemente estará sesgada.
A estos les diría que sigan apoyando al equipo en esta nueva aventura y que cada vez haya más sentimiento naranja, independientemente de quién entrene, quién juegue y en qué liga esté el Básquet Coruña.
Sin duda, lo mejor del año ha sido la afición y el escenario. Que se haya conseguido en apenas una semana que más de 3.000 incondicionales pretendan renovar su abono a ciegas, sin que nadie de la directiva haya salido todavía a vender el proyecto de la nueva temporada, habla de que A Coruña continúa queriendo baloncesto de máximo nivel.