Adjudican a Viaqua la reforma de la depuradora de Aguións para atajar los vertidos al río

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

cedida

El exceso de caudal ahora aliviado hacia el Liñares se bombeará hacia el inicio del ciclo de depuración

14 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de A Estrada acaba de adjudicar a la empresa Viaqua las obras de reforma de la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de Aguións para tratar de mejora su rendimiento.

El Concello había solicitado presupuestos a tres empresas. Entre las propuestas, la de la firma Viaqua fue considerada la más ventajosa. Según explicó ayer el edil estradense responsable de Medio Rural y Medio Ambiente, Juan Constenla, la adjudicación se hizo por cerca de 12.000 euros y el plazo de ejecución concluirá a finales del presente mes de septiembre.

La planta depuradora se había construido en el 2005, con capacidad para 10.000 personas. Doce años después, los informes técnicos que maneja el gobierno local demuestran que está infradimensionada, teniendo en cuenta la población actual de A Estrada y el volumen de agua que está recibiendo la EDAR. Distintas circunstancias -incluida la incorrecta conexión de las aguas pluviales a la red de alcantarillado- hacen que el volumen que llega a la depuradora sea más del que la planta puede tratar y los excedentes acaben siendo aliviados al río Liñares.

Mayor rendimiento

El propio gobierno reconoce que la obra no es la solución idónea al problema. Lo óptimo sería redimensionar la EDAR, pero ante la falta de fondos para hacerlo, el Concello confía en que los ajustes puedan mejorar el rendimiento de la depuradora y evitar los vertidos al río.

Las mejoras previstas contemplan una variación en el circuito para que los sobrantes que la depuradora ahora alivia vertiendo directamente al río sean bombeados para devolverlos al inicio del ciclo de depuración, para ser tratados.

Mejorar la sedimentación

Asimismo, en la zona de entrada del caudal de aguas residuales a la depuradora -donde se separan las aguas fecales de los residuos que no deberían arrojarse al inodoro- se instalará una reja autolimpiable. También se cambiarán dos de las bombas que lanzan el agua hacia la zona de decantación por unas de menor caudal para mejorar el proceso de sedimentación. Por último, se instalará una cubierta sobre los contenedores de la línea de desbaste para evitar que se llenen con la lluvia y desborden.