Los equipos de emergencia se multiplicaron ante las numerosas caídas de árboles
12 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Si la lluvia caía con fuerza el fin de semana, ayer era la nieve la que hacía acto de presencia en el monte Faro en Rodeiro ?en Dozón empezó a media tarde pero no fue a más?, con blancas estampas que el alcalde Luis López hubiera preferido el fin de semana para que la presencia de visitantes dejase más consumo en la hostelería local. El domingo y ayer los equipos de emergencia no tuvieron tregua.
En Lalín se contabilizaron más de 20 emergencias destacables por el temporal Ana, indicaba el edil responsable de Emerxencias y Protección Civil, Miguel Medela. El operativo especial activado tuvo localizables a todos sus miembros, además de los de guardia, por si fuese precisa su incorporación inmediata. Anegamientos de bajos y caídas de árboles, con vientos de más de 120 kilómetros por hora fueron las principales incidencias, junto a contenedores de basuras tirados y caídas de postes de electricidad y telefonía. Hubo anegamientos en en las calles Cruceiro, Estación, Areal y Molinera; y retiradas de árboles en Cangas, Castro de Abaixo, A Romea, Filgueira y Piñoi, entre otras. El alcalde felicitó a los efectivos de Emerxencias y Protección Civil, así como al propio Medela.
En Silleda, personal municipal retiró ayer por la mañana piedras desprendidas en la bajada al monasterio de Carboeiro; se soltó un toldo en la rúa Braña do Medio, y se vio afectado un trozo de cubierta de la nave municipal de Área 33. Varios contenedores movidos por el aire chocaron contra coches, y una rama cayó sobre alumbrado público en Laro. El viento tumbó árboles en Oleiros y Escuadro, y hubo alcantarillados desbordados y cortes de luz: el más grave afectó a viviendas de Camporrapado (Cortegada) desde las 17 horas del domingo hasta las 11 horas de ayer, indicó el Concello.
En Cruces no quedó prácticamente parroquia sin incidencia. Las caídas de árboles fueron una constante en Brandomés, Ollares, Arnego ?motivaron el retraso de algún autobús escolar al colegio de Cruces por la mañana? pero también en Piloño, Añobre, Camanzo y Arnego, por citar algunas. Se interrumpió la circulación en viales provinciales como Ferreirós-Ollares, Merza-Fontao y Bascuas-Merza. La caída de un árbol sobre el tendido telefónico dejó a la aldea de Pastoriza (Brandomés) sin servicio. En A Carixa, la crecida del río se llevó una barandilla. Hoy se prevé contar con una retro externa al Concello para seguir el trabajo junto a los 7 operarios municipales.
También en Agolada dos brigadas de ocho personas se emplearon a fondo en la retirada de árboles. Se cortó la provincial Brántega-Berredo de las 21 horas del domingo a las 10 de ayer, por la caída de cuatro eucaliptos de grandes dimensiones. También hubo que acudir a Vilariño, Val de Sangorza, Borraxeiros y Ventosa, entre otras zonas. Las brigadas de la Diputación también trabajaron en toda la comarca.
Cortes de luz en A Estrada, inundación en Pontemaril y más de 80 incidencias en Cerdedo
En Tabeirós-Montes la borrasca dejó un reguero de desperfectos. En el municipio estradense, los árboles caídos y los cortes de luz fueron los principales inconvenientes. El domingo una incidencia que afectó a la zona de Toedo dejó sin suministro eléctrico a 1.200 clientes que fueron recuperando el servicio escalonadamente. A las 21.30 horas todos tenían luz. Otra incidencia en el transformador de Pardemarín dejó sin suministro la noche del domingo a 45 hogares que volvieron a recuperar la normalidad a las 15.22 horas de ayer, según informa Gas Natural. Emerxencias A Estrada retiró la tarde el domingo unos cuarenta árboles que obstaculizaban viales. Ayer actuó retirando árboles desplomados en otras 14 pistas del municipio. En la mayor parte de los casos, los ejemplares cortaban por completo las vías. Las incidencias de este tipo fueron generalizadas en todo el municipio. Se actuó, por ejemplo, en Ribeira, Moreira, Couso, Lamas, Arnois, Guimarei, A Grela o Berres.
El temporal provocó también la aparición de goteras en el recinto de la Fundación de Exposicións e Congresos, aunque no en la parte en la que la cubierta acaba de ser remodelada, según informa el teniente alcalde estradense Juan Constenla.
En Pontevea, el río Ulla recuperó caudal a ritmo vertiginoso, aunque sin riesgo de desbordamiento. Donde sí hubo desbordamiento del río fue en Pontemaril (Forcarei). El agua sobrepasó el puente de acceso al campamento juvenil. También quedó anegada el área recreativa fluvial de A Freixeira. Además, cayeron muros y se desprendieron arcos del alumbrado navideño.
En Cerdedo-Cotobade se atendieron más de 80 incidencias. Miembros del gobierno, operarios municipales y Protección Civil trabajaron todo el día. El paso de la borrasca se superó sin daños graves pese a los 120 litros por metro cuadrado caídos en la localidad.
La crecida del río Deza se llevó por delante el puente de madera antes de su estreno oficial
Otra de las consecuencias más graves en el municipio de Lalín es el derrumbe del puente de madera construido entre Bustelos y Moa, en la Serra do Candán. La fuerte crecida del río Deza en ese punto, donde además confluyen otros cauces fluviales, se llevó por delante una estructura recién construida, sin tiempo siquiera para su estreno oficial. De hecho, el Concello de Lalín señala que «a colocación desta infraestrutura aínda non estaba finalizada», por más que en redes sociales aparezcan fotografías y vídeos de caminantes paseando por el puente con normalidad en los últimos días. El Concello explica que «os técnicos responsables da obra xa están tratando de recuperar a ponte para volver instalala coas garantías necesarias. O río aumentou neste lugar o seu nivel en máis de 6 metros en poucas horas».
Fuertes críticas
El derrumbe ha generado fuertes críticas contra el modo en que el gobierno de Lalín acometió la construcción del puente. Fuentes vecinales de la zona aseguran que no se habló con los lugareños, pese a contar con experiencia porque ya con anterioridad prepararon ellos mismos dos sencillas estructuras que el río se llevó. Aseguran que el puente «máis breve da historia, polo menos do Deza» estaba colocado como mínimo dos metros por debajo del nivel que alcanza el río. El exedil popular José Antonio González incide en esa línea, y recuerda que Vilatuxe Trail podía haber asesorado sobre la cuestión «pero claro todo lo sabemos y todo lo entendemos», preguntándose por el coste de la obra.
El Concello de Lalín señala que «os técnicos responsables da obra xa están tratando de recuperar a ponte para volver instalala coas garantías necesarias».