Consumo da la razón a los ciudadanos en casi el 90 % de las reclamaciones que presentan
24 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Que la factura de la luz y todo lo relacionado con el suministro eléctrico es un quebradero de cabeza para la inmensa mayoría de los consumidores españoles lo prueba la última encuesta realizada por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que concluye que siete de cada diez clientes no son capaces de identificar datos tan básicos como la compañía que les presta el servicio, qué tarifa se les aplica o si están en el mercado libre o en el regulado. Precisamente por ello, porque el recibo suena a chino, es terreno abonado para incluir abusos, como cargos por servicios cuya contratación no se ha solicitado o para los que no se ha dado consentimiento. Y los consumidores gallegos reclaman.
Según los datos facilitados por la Consellería de Economía, Emprego e Industria, en los primeros nueve meses del año el Instituto Galego do Consumo e da Competencia (IGCC) tramitó un total de 1.744 reclamaciones relacionadas con el sector eléctrico, es decir, una media de seis denuncias al día.
De hecho, el volumen de quejas sobre abusos y fraudes vinculados a la luz se mantiene en un nivel similar al del pasado ejercicio, ya que durante el 2016 Consumo registró 2.570 reclamaciones, lo que se traduce en una media diaria de siete.
Segundo sector con más quejas
Desde la Xunta destacan, además, que el sector eléctrico está, año tras año, entre los que más reclamaciones acumulan. En concreto, en el 2016 fue el segundo por número de quejas (el 16,4 % del total), solo superado por el sector de la telefonía.
Y la misma situación se repite en lo que llevamos de año: el eléctrico continúa luciendo la medalla de plata en el poco honroso podio de los lamentos de los consumidores, sumando el 13 % del total de las reclamaciones que el IGCC ha tramitado hasta el momento.
Otro dato importante a tener en cuenta es que en la inmensa mayoría de los casos -concretamente, en más del 86 %-, las autoridades de Consumo resuelven de manera favorable a los consumidores, lo que evidencia lo extendidos que los abusos están en el sector.
Tanto es así que esta misma semana la CNMC planteó al Gobierno la necesidad de prohibir fórmulas agresivas de comercialización de las eléctricas, como las campañas que realizan puerta a puerta para tratar de captar clientela para el mercado libre. Competencia sostiene que esta fórmula es terreno abonado para los abusos y el engaño al cliente, por lo que plantea al ministerio que siga los pasos del Reino Unido y prohíba estas campañas a domicilio.
Energía admitió que ha tenido la medida sobre la mesa en varias ocasiones, pero que la considera drástica en exceso, aunque la estudiará de nuevo en los próximos meses en el marco de una reforma más amplia del sector.