El futuro rector de la universidad de Abanca reclama un cambio completo en la educación superior

R. S. REDACCIÓN / LA VOZ

EDUCACIÓN

Miguel Ángel Escotet, durante la conferencia sobre la universidad
Miguel Ángel Escotet, durante la conferencia sobre la universidad

Pide un aprendizaje y renovación constante para los docentes

10 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Miguel Ángel Escotet, el que será futuro rector de la Universidad Intercontinental de la Empresa, la institución promovida por Abanca, reclamó una transformación completa de la educación superior, como reflexión general, sin centrarlo exclusivamente en Galicia o en España. «La educación y específicamente la universidad tiene que revolucionar su naturaleza actual para estar cambiando sin pausa para resolver las situaciones nuevas, para arriesgarse a pensar, para seguir aprendiendo. Todo ello tiene que comenzar por los propios actores universitarios, aplicando estas premisas a nosotros mismos», dijo durante un encuentro internacional de educación en Santiago.

Escotet, un hombre que conoce bien el sistema universitario americano (ha trabajado en varias en Estados Unidos y América Latina) y que es experto en formación educativa, no se suele prodigar en encuentros públicos, y la de este viernes en Santiago es la primera reflexión pública que hace el que está llamado a ser máximo responsable de la primera universidad privada de Galicia. Lo hizo además en un encuentro que patrocinaba la USC, una de las instituciones que se ha mostrado en contra de que Galicia cuente con un campus privado, aprobado ya por Gobierno, Xunta y Parlamento de Galicia.

Y en esa reflexión no fue nada contemplativo con la situación de la educación superior en general, comenzando por los propios docentes y rectores, sin referirse nunca a ninguno en concreto. «Las universidades tienen grandes profesores sin lugar a duda, pero también tienen grandes impostores. Todo ello, nos obliga a un proceso de cambio, de cirugía institucional, que ponga a la universidad al servicio de la sociedad y que le rinda cuentas», reflexionó.

«Los cambios de las universidades, como las de otras instituciones sociales, no se producen si no vienen aparejados con los cambios en las personas a lo largo de la vida», abundó. «En primer término, no deben existir categorías aristocráticas de profesores de diferentes niveles educativos. Considero que son más importantes los maestros durante los 10 primeros años de vida que los de educación superior o de nivel posuniversitario», añadió.

A juicio de Escotet, «los cambios producidos en la mayoría de los sistemas universitarios han sido reformas parciales, superficiales, que no han conducido al cambio integral que demanda el desarrollo global y sustentable».

Su propuesta pasa por un aprendizaje constante para alumnos y, sobre todo, profesores, que sirvan para adelantarse a los cambios sociales y a las demandas laborales, con formación transversal, con «un cambio total de actitud en profesores y estudiantes, al tener que pasar de una educación terminal a una educación permanente». Y ahí no podrán estar instituciones que se queden en «meros cambios cosméticos».

Escotet evitó entrar a detallar cómo será la Universidad Intercontinental, pero sí dio pistas al apuntar a áreas de conocimiento con más posibilidades de inserción: servicios vinculados al ocio altas tecnologías en electrónica, energías verdes, sistemas inteligentes, ciencia de datos, acuicultura, conservación y renovación oceánica, agroenergética, biotecnología, física de altas energías, y áreas de la salud, o algunas nuevas como la ludicadología, integrando psicología, educación, ciencias de la información y tecnología, como ejemplo de esa formación transversal frente a «viejos esquemas de profesiones unidisciplinares».