El cierre de campaña del PSOE || Gonzalo Caballero clama por una «movilización masiva» para el cambio en Galicia

ELECCIONES 2020

Gonzalo Caballero en el mitin ofrecido en Vigo para cerrar la campaña
Gonzalo Caballero en el mitin ofrecido en Vigo para cerrar la campaña Xoán Carlos Gil

«Cada día estamos máis fortes, estamos mellor, pero non podemos baixar a guarda», proclamó en el cierre de campaña al que no pudo asistir el presidente del Gobierno

10 jul 2020 . Actualizado a las 23:44 h.

Fin de campaña imprevisto para el PSdeG. La avería en una rueda del avión alquilado para que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se desplazase a Vigo para reclamar el voto para Gonzalo Caballero, privó al candidato socialista de una de las bazas principales con la que contaba para despedir la campaña y tratar de movilizar definitivamente a su electorado. «Lamento no poder viajar a Vigo por una avería técnica en el avión para estar con los compañeros y compañeras del PSdeG apoyando a nuestro candidato Gonzalo Caballero», escribió el líder socialista en su cuenta de Twitter como explicación del incidente que lo dejó en Barajas.

El estallido de la rueda dejó fuera de servicio a la nave, suceso que es la segunda vez que le ocurre a Sánchez desde que es presidente, tal y como recordó su sustituto improvisado, el ministro y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos. El responsable de Transportes del Gobierno se había quedado en la provincia de Pontevedra a pasar el fin de semana tras participar en los últimos dos días en actos electorales de su partido

 «Hagamos que Galicia avance el 12J ¡Llenemos las urnas de votos socialistas!» zanjó en su misiva en las redes Sánchez en la reiterada llamada que los socialistas han lanzado en el parque vigués de Castrelos para incentivar la movilización de los suyos y del voto progresista, apelando con ello al cambio, palabra resumen en el cierre de campaña del PSdeG. «Cada día estamos máis fortes, estamos mellor, pero non podemos baixar a guarda», terció Gonzalo Caballero desde el primer momento apelando a esa movilización que esperan los socialistas para remontar las encuestas, apelando incluso al temor «a que a ultradereita quere entrar no Parlamento. Hay que estar alerta, máis cando pode darse una baixa participación», admitió el candidato del PSdeG pulsando la tecla del miedo a «intolerancia» política en Galicia.

Los socialistas invocaron la palabra mágica del cambio para liderar el próximo Gobierno de la Xunta, en una pelea que el PSdeG libra en dos frentes. Por un lado, trata de restar los votos necesarios al PP para que pierda la mayoría absoluta, y por otro, evitar el sorpasso del Bloque, que podría hacerles seguir como tercera fuerza en el Parlamento gallego como ocurrió hace cuatro años cuando se vio superado en votos por En Marea.

Gonzalo Caballero con Jose Luis Ábalos en Pontevedra por la mañana
Gonzalo Caballero con Jose Luis Ábalos en Pontevedra por la mañana CAPOTILLO

 «Esto es un proyecto global», clamó al inicio Abel Caballero restando trascendencia a la ausencia de Pedro Sánchez, del que dijo pronto estará en Vigo y «con Gonzalo Caballero como nuevo presidente de la Xunta». 

«Necesitamos o voto útil para darlle a Galicia un cambio positivo, non pode quedar un voto na casa. Quero unha movilización masiva», se arrancó Gonzalo Caballero para no dejar duda de que su mensaje central es la apelación a una participación masiva como garantía para tratar de romper la mayoría absoluta del PP. «Eu amoso as miñas siglas e o meu proxecto porque vin a servir a Galicia», añadió, dando por hecho que «imos gañar as eleccións. É a hora do cambio, do futuro do pais, para darlle una folla de ruta mellor», gritó incluso Gonzalo Caballero pidiendo ese voto útil de todos los progresistas «para poñer fin ao PP e retirar a Feijoo».

Cambio, cambio y cambio, esa es la idea central con la que se despide hasta el domingo el candidato a la presidencia de la Xunta. «Quen quera unha Galicia mellor, que mire para o PSdeG», dijo una y otra vez el candidato para aseverar que no hay otra opción con posibilidades frente al PP. «Se non conseguimos unha movilización masiva, estaremos errando. Vos pido que traballemos por una Galicia mellor. Somos máis y por iso temos que ir a votar», insistió para exigir que la abstención sea residual, mientras apeló al 55 % de los habitantes de Galicia que tienen alcaldes de su partido. «Esa Galicia tense que erguer para non ter que seguir manfestandose na rúa, estou farto diso e non podemos soportar una lousa así catro anos máis. “Somos a forza do cambio, Nin somos nacionalistas, somos galeguistas, non simos rupturistas, somo reformistas», proclamó en su última presentación ante el electorado para distinguirse de quienes pueden ser sus socios de Gobierno y que sin embargo disputan al PSOE el liderazgo de la izquierda.

Dio vueltas Gonzalo Caballero a la idea de que el proyecto del PP está agotado. «E hora da rexeneración, da ética e dos servizos públicos», al tiempo que reivindicó un mayor dinamismo para Galicia e ideas nuevas ante los problemas que arrastra la comunidad. «Galicia ten que desatascarse sacando ao PP da Xunta de Galicia», pidió para terminar.

El ministro Ábalos aprovechó su inesperada presencia para reivindicar los resultados del confinamiento decretado por su Gobierno frente a la pandemia, y también él, como el resto de los intervinientes, contrapuso a la gestión del Ejecutivo socialista los reparos que dijo se encontraron desde el PP. «No han estado a la altura y no han perdido la ocasión para la bajeza». Incluyó en ese mismo saco a «Feijoo, que se opuso» a las prórrogas al estado de alarma. «Decía que íbamos a cargarnos la economía. No entendieron que estábamos entregados a que la gente no sufra y a su salud», recalcó asegurando que no contaron con empatía alguna del PP.

En el acto de Vigo junto a Abel Caballero, Jose Luis Ábalos y Noelia Otero
En el acto de Vigo junto a Abel Caballero, Jose Luis Ábalos y Noelia Otero Xoán Carlos Gil

Criticó las protestas de barrios de Madrid que exigían libertad. «Quieren tener la exclusiva y la libertad de explotar, ofender y abusar», continuó en una larga intervención en la que apenas citó a Gonzalo Caballero y las elecciones gallegas. «Son verdaderamente los herederos de la dictadura», dijo al referirse a la ultraderecha, a la que acusó de promover «la involución que hay en este país». Eso sí, Feijoo fue objeto de sus escasas referencias gallegas, para criticar que «no se comprometa ni con su partido», señaló ante la ausencia de iconografía de su formación en sus carteles, para indicar que en cambio Gonzalo Caballero encarna la idea de no conformarse. «Esta tierra -por Galicia- no se lo merece y no lo ponen en valor».

«Hay que salir a votar por el futuro de Galicia, no de Feijoo, que eso solo le interesa a él. Hay que pensar en las personas», concluyó el ministro. «Solo siendo tu presidente, Gonzalo, Galicia saldrá para adelante».

El alcalde de Vigo, uno de los más aclamados por las 900 personas que dijo se dieron cita en el parque de Castrelos, aplaudió la gestión del Gobierno central en la pandemia, para, a partir de esa reflexión, contraponer lo que definió como un ataque permanente de Feijoo a Vigo, que hizo extensivo a Rajoy y Ana Pastor, a los que culpó de «habernos quitado el AVE a esta ciudad». Contrapuso esa negación continua que dijo ha tenido el PP hacia Vigo, con el entendimiento y apoyo que asegura le presta el Ejecutivo central. «Queremos un cambio en la Xunta porque queremos tener la energía y sinergias con el Gobierno de Galicia y que no distinga por colores políticos. Yo gobierno en Vigo para todos», volvió a comparar a los dos principales partidos, mostrándose seguro de la victoria de su sobrino.