Hay herramientas para saber qué sentimos y poder controlarlo. Este curso te vamos a enseñar a usarlas
07 oct 2025 . Actualizado a las 22:21 h.—Profe, ¿para qué sirve estudiar tanto si luego me pongo nervioso y me quedo en blanco en los exámenes?
—Me alegro de que me hagas esa pregunta. ¿Sabes qué? Las emociones son tan importantes como las Matemáticas o el Inglés. Si no aprendes a entenderlas, te costará mucho más tomar buenas decisiones en tu día a día.
—Entonces… ¿de eso también se puede aprender?”
—Claro que sí».
¡Empezamos un nuevo curso escolar y vamos a seguir hablando de emociones, aunque con un formato diferente!
Todos los comienzos traen consigo una mezcla de emociones: ilusión, nervios, inseguridad, curiosidad, ganas de descubrir... Y todas son válidas. Como siempre os decimos, lo importante no es que evitemos sentir estas emociones, sino reconocerlas, aceptarlas y aprender a gestionarlas.
Porque sí, a todos nos pasan cosas en nuestro día a día que nos hacen emocionarnos. Y desde esas emociones, vamos tomando nuestras pequeñas o grandes decisiones.
Comprender qué sentimos
Por ejemplo: si estamos enfadados, posiblemente actuaremos de una forma impulsiva, respondiendo rápido y sin pensar demasiado en las posibles consecuencias. ¡Seguro que desde el enfado no tomaremos la mejor decisión! Si, por el contrario, estamos felices, es más probable que nos arriesguemos a probar cosas nuevas, queramos hacer más planes con nuestros amigos…
Este curso vamos a hablar de lo que sentimos, de lo que pensamos, de cómo nos comportamos y, en definitiva, de lo que podemos aprender sobre nosotros para comprendernos mejor y tomar mejores decisiones, por eso hemos titulado la sección Entre emociones y decisiones.
Nuestro objetivo es exponerlo de una manera clara, con ejemplos sencillos, planteando preguntas que nos ayuden a pensar y a reflexionar.
Pondremos siempre el foco en el autoconocimiento, en generar relaciones positivas con las diferentes personas de nuestro entorno y, en definitiva, en nuestro propio bienestar.
Poco a poco debemos aprender a escucharnos y a ponernos en marcha de forma consciente, incluso cuando el camino sea incierto y tengamos muchas dudas.
Cada emoción trae consigo un aprendizaje, y cada decisión que tomamos nos ayuda a crecer, así que:
- Escucha lo que sientes. Tus emociones te dan pistas de lo que necesitas.
- No temas equivocarte. Cada error trae una oportunidad de aprender.
- Toma tus decisiones. Aunque parezcan pequeñas, van construyendo tu camino.
Seguiremos incluyendo sugerencias, herramientas o reflexiones dirigidas a los padres, profesores y educadores que sirvan para acompañar mejor a los jóvenes en esta etapa de su vida. Sentirse comprendidos por los adultos de su entorno es fundamental para su desarrollo personal y emocional.
Este curso os invitamos a caminar con nosotras entre emociones y decisiones.