Nueva movilización en las calles de Barcelona después de una noche de tensión

Europa Press BARCELONA

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Miles de personas se concentran desde este jueves a mediodía ante en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña contra la «represión» del Estado por el referendo

21 sep 2017 . Actualizado a las 18:01 h.

Miles de personas se concentran desde este jueves a mediodía ante en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) contra la «represión» del Estado por el referéndum del 1 de octubre.

Convocados por la ANC y Òmnium Cultural, los concentrados piden libertad para los altos cargos del Govern detenidos el miércoles por la Guardia Civil por su vinculación con los preparativos del el 1-O.

Fuentes de las entidades soberanistas han destacado que la manifestación no se desconvocará hasta que se libere a todos los detenidos: «Dormiremos aquí si es necesario».

Los altos cargos que todavía están detenidos -algunos ya han sido puestos en libertad- no están en el TSJC, sino en varios cuarteles de la Guardia Civil, pero se ha elegido este escenario para la concentración por su simbolismo y porque el caso lo está llevando el Juzgado 13 de Barcelona.

Noche de tensión en Barcelona

Los agentes de la Guardia Civil que han registrado la consejería de Economía de la Generalitat durante todo el miércoles con relación a los preparativos del referendo del 1-O, han salido en dos grupos a las 3 de la madrugada de este jueves y a las 7.15 de la mañana, protegidos por los Mossos d'Esquadra antidisturbios ante unas pocas personas que seguían concentradas. Esta mañana se ha reanudado la actividad laboral. 

Los Mossos d'Esquadra han confimado esta mañana que no han detenido a ningún ciudadano durante las diversas concentraciones de protesta que se formaron ayer en Barcelona por el 1-O, y que culminaron con la congregación de 40.000 personas frente la sede de la consejería de Economía y Hacienda de la Generalitat.

A lo largo del día hubo algunos momentos de tensión entre las fuerzas policiales y los manifestantes, que destrozaron varios vehículos de la Guardia Civil a los que pincharon las ruedas, colocaron pegatinas con lemas a favor del referendo e hicieron pintadas a favor de la independencia.

Sobre la 1.30 de la madrugada, los Mossos empezaron a alejar de la fachada a los centenares de ciudadanos que seguían concentrados pese a que los líderes de la ANC y de Òmnium Cultural habían dado por acabada la movilización poco antes de medianoche.

Desde la 1.30 horas ha habido forcejeos entre la policía catalana y los activistas cuando mossos antidisturbios han establecido un perímetro ante el edificio para preparar la salida de los guardias civiles -antes han pedido por altavoz que la gente se apartara-.

Un herido

Poco antes de las 2, una ambulancia se ha llevado a una persona que ha resultado herida durante el forcejeo con los antidisturbios -que ha incluido lanzamiento de objetos de los activistas y golpes de porra de los agentes-, mientras los concentrados se han tenido que mantener en la acera central de la Rambla de Catalunya.

Hasta que ha salido la media docena de guardias civiles de paisano, algunos de los movilizados han increpado puntualmente a los Mossos pero no ha habido más incidentes, y lentamente ha ido menguando la presencia de concentrados.

A las 3.00 horas han salido esa media docena de agentes y se han subido a coches sin logotipo policial, mientras los concentrados les han increpado y han tirado algún objeto.

Pocos minutos después de esta hora, los Mossos han pedido por altavoz que la gente se apartara aún más y se han dirigido a los sentados para que se levantaran: los han ido apartando, aunque otros se iban sentando, pero también se les ha apartado, sin cargar contra ellos.

A las 3.20 horas ha quedado despejada la acera central de la Rambla de Catalunya frente a la puerta de la consejería y el centenar de concentrados se ha ido quedando en unos 20 sobre las 6 de la mañana.

A pesar de ir menguando los concentrados, los guardias civiles que seguían ante la sede de la Generalitat no se han ido; solo alguno ha salido para comprobar el estado de los cuatro vehículos logotipados de Guardia Civil. Al constatar que no podían irse en ellos por tener ruedas pinchadas y los vidrios con pegatinas, han avisado para que se los llevara la grúa -que han retirado tres hasta las 6.40 horas-. A las 7.15 horas ha salido el resto de guardias civiles, una quincena.

A medianoche se pidió disolver la concentración

Poco antes de medianoche, Jordi Sànchez (ACN) y Jordi Cuixart (Òmnium), subidos a un coche de la Guardia Civil, habían pedido que la gente volviera a sus casas. Ambos dirigentes y los políticos que habían acudido se marcharon, pero se quedaron muchos movilizados.

 Durante el miércoles llegó a haber 40.000 concentrados según cifras de la Guardia Urbana, y a mediodía la concentración ante la consejería se convirtió en un corte de la Gran Via, la calle con la que hace esquina el departamento, en la Rambla de Catalunya.

La salida de estos agentes de la Guardia Civil se ha convertido a lo largo del día en una operación delicada para la policía catalana, después de que el mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, ha pedido a los agentes que sean «especialmente restrictivos y cuidadosos en el uso de la fuerza».

El cuartel de Manresa, rodeado

Centenares de personas han rodeado la noche de este miércoles el cuartel de la Guardia Civil en Manresa, Barcelona, y han colocado una «estelada» en la fachada del edificio. Pasada la medianoche, la situación en el lugar estaba normalizada, según indicaron fuentes del Instituto Armado.

Los incidentes se han producido tras una manifestación convocada en el centro de la localidad a favor del referendo y para denunciar los registros y detenciones practicadas este miércoles en relación con la consulta.

Tras la marcha, centenares de personas han rodeado el cuartel, ubicado en la carretera de Cardona, y han logrado colocar una «estelada» en el mástil de la fachada. Además, los congregados han causado desperfectos importantes en al menos un vehículo patrulla de la Guardia Civil, que ha quedado prácticamente destrozado.

La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) ha denunciado los hechos y ha asegurado estar «preocupada» ante este tipo de incidentes.