Su jefe de Gabinete le informó de Utiel dos horas antes de acabar la comida
27 nov 2025 . Actualizado a las 08:30 h.Carlos Mazón, jefe del Consell en funciones —dejará de serlo si sale adelante hoy la investidura del número dos del PPCV, Juanfran Pérez Llorca—, insistió en que, tras salir del restaurante El Ventorro entre las 18.30 y las 18.45 de la tarde, acudió «andando desde la puerta del párking» al Palau de la Generalitat el día de la dana, el 29 de octubre del 2024. «Ya he desmentido muchas informaciones y hoy vuelvo a hacerlo», remarcó el presidente autonómico en funciones, en una previsible referencia a la notica del diario Levante EMV, que asegura, basándose en fuentes del Partido Popular, que Maribel Vilaplana acercó con su vehículo a Mazón a las inmediaciones de la sede del Consell.
Este martes, el Juzgado de Instrucción número 3 de Catarroja, a cargo de la causa penal de la dana, acreditó que la periodista pagó por el estacionamiento de su vehículo a las 19.48 horas y abandonó el aparcamiento tres minutos después. Mazón cambió en varias ocasiones de versión sobre su actuación el día de la dana. La Generalitat, en un primer momento, aseguró que le presidente llegó al Palau a las cinco de la tarde. El jefe del Consell siempre ha mantenido que, después de la comida, estuvo trabajando desde el Palau. Pero si Vilaplana salió del aparcamiento a las 19.51 horas con Mazón, el espacio de tiempo que estuvo en la sede de Gobierno es muy reducido, ya que las cámaras del Cecopi muestran su entrada a las 20.28 horas. En el margen de una hora, entre que sale del restaurante y Vilaplana retira su vehículo, entran también los 37 minutos en los que Mazón no recibió ni realizó llamadas. En este lapso, desatendió dos de Salomé Pradas, consejera de Interior y al frente del Cecopi.
José Manuel Cuenca, testigo
Por otro lado, este miércoles compareció como testigo en Catarroja el secretario autonómico de Gabinete del President, José Manuel Cuenca. Amigo personal y compañero de piso del jefe del Consell, admitió «alguna inexactitud» a la hora de comunicar la agenda de Mazón el 29 de octubre. El alto cargo, que remarca que no conserva sus conversaciones de WhatsApp con Mazón porque cambió de móvil, avisó al presidente a las 16.56 horas de que la situación en Utiel «se estaba complicando». Entonces quedaban casi dos horas para que Mazón saliera del restaurante. También aseguró que no estaba previsto que el mandatario acudiera al Cecopi, habida cuenta de que Pradas ya representaba al Gobierno en el centro de mando. «Salomé nos tenía al corriente a través de comunicación especializada».
Cuenca, además, negó que se le pidiera opinión a Mazón del envío de la alerta a los móviles de toda la provincia. Tampoco a él: «Es un criterio técnico, cuando en un incendio se decide desalojar un pueblo nadie pregunta a Presidencia». El alto cargo detalló, sobre la llamada que mantuvo con Mazón a las 19.41 horas, que este le dijo que acudiera a la sede del Cecopi en La Eliana. «Yo me voy con [el asesor Josep] Lanuza y me voy a acercar a la Eliana porque hay un problema gordo con el metro según me dice [el secretario autonómico de Infraestructuras, Francisco Javier] Sendra», le aseguró Mazón, según aseguró este miércoles Cuenca.
Dos menús y sobremesa por 165 euros
El Partido Popular valenciano pagó por transferencia 165 euros por la comida del presidente autonómico, Carlos Mazón, y la periodista Maribel Vilaplana. El almuerzo de trabajo finalizó, según declaró en sede judicial el dueño del restaurante El Ventorro, Alfredo Romero; a las cinco de la tarde. Aunque la sobremesa se extendió durante al menos una hora y media. Tanto el hostelero como la comunicadora sitúan pasadas las seis y media de la tarde la salida de Mazón y Vilaplana del céntrico establecimiento.
Además, Romero aportó varias imágenes del reservado en el que se desarrolló la comida. Se trata de una habitación, con dos grandes ventanales de techo a suelo con cortinas, una mesa ovalada en el centro con varias sillas, un sillón y un mueble auxiliar. Nuria Ruiz Tobarra, la jueza de Juzgado de Instrucción número 3 de Catarroja que instruye la causa penal de la dana, aceptó requerir estas imágenes por la jueza la admitió por la «necesaria valoración de la posibilidad de escuchar» conversaciones de Mazón referidas a la emergencia.
Romero también facilitó la factura de la comida, que tal como dijo en sede judicial solo aporta la fecha de la comida. Añade detalles como el precio —165 por «dos menús concertados», sin detallar qué comieron o bebieron—, el número de mesa (106) y el pagador, también ya conocido: el Partido Popular. El hostelero añadió los planos de la estancia, situada en la primera planta del inmueble del restaurante. Cuenta con 4,43 metros de largo por 2,83 de ancho.
En su testifical del 21 de noviembre, Alfredo Romero contó que la reserva la realizó la Generalitat «dos o tres días antes» y que dispone de wifi, aunque ni Mazón ni Vilaplana solicitaron la contraseña. El empresario remarcó que la estancia genera problemas de cobertura a los usuarios de Vodafone y Orange. Además, contó que en las cinco o seis veces que accedió al reservado para atenderles, nunca vio a Mazón levantado ni realizando llamadas telefónicas.