Apúntate a la moda creada por Buda

Blanca Hermida

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La leyenda cuenta que el primer árbol de té nació en el lugar donde el propio Buda derramó sus lágrimas. Con casi 5000 años de historia, esta infusión, que no llegó a Europa hasta el siglo XVII, compite hoy por robarle protagonismo al café en todo el mundo. En España ha crecido un 8,9 por ciento y en Estados Unidos se prevé que supere al café en el 2017. Estas son las claves para conocerlo y disfrutarlo con calma.

17 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

No es cerveza pero su popularidad sube como la espuma. El consumo de té se ha disparado en todo el mundo: en EE. UU. amenaza con superar al café en 2017 y en Europa hace tiempo que dejó de ser una costumbre británica. ¿Una cuestión de moda? Puede. Aunque Eileen, de la Asociación Española de Té e Infusiones (AETI) recuerda que «el consumo de té e infusiones no lo consideramos como una moda, ya que en otras culturas viene consumiéndose desde tiempos inmemoriales». Reconoce, sin embargo, que en países como España existe un auge que se debe, «probablemente, al mayor interés y preocupación que tienen los consumidores por un estilo de vida saludable».

Los últimos estudios arrojan un aumento del 9,8 por ciento del consumo de esta infusión en España. «Afortunadamente -explica-, a diferencia de otros muchos productos del sector alimentación, el consumo de tés e infusiones en España se ha visto incrementado a pesar de la crisis económica que ha sufrido el país. Lo que hemos apreciado ha sido además un trasvase de canal, habiendo visto reducido el consumo en el mercado de hostelería que se ha compensado en el canal alimentación». Es decir, que la gente toma más té pero sobre todo lo toma más en casa.

¿Y qué es lo que hace que en el mundo se consuman al día 3,2 millones de tazas de té frente a 1,6 de café? «Las infusiones -cuenta Eileen- se han utilizado desde siempre como remedio natural, sus propiedades siguen siendo las mismas que nos transmitieron con tanto cariño nuestras abuelas por lo tanto tienen perfecta cabida en una dieta sana y equilibrada».

Los partidarios del té están encantados: ahora es fácil encontrar en cualquier ciudad española tiendas especializadas en las que comprar hojas de las variedades más exóticas. Pero, ¿y el té de supermercado, el que viene en bolsitas, es de peor calidad? «Por supuesto que es realmente té, -afirma la experta- de lo contrario no podría venderse.  Se trata en todos los casos de la planta camellia sinensis en sus distintos grados de oxidación (té negro, verde o rojo por poner un ejemplo).  En función del tiempo que se deje fermentando tendrá unas propiedades más arraigadas que otras».

Al té se le adjudican propiedades de todo tipo: antioxidante, refuerzo de las defensas, mejora del sistema circulatorio y prevención del cáncer, entre otras, pero en la actualidad, la explosión en el consumo del té verde y del rojo viene, sobre todo, por sus supuestas cualidades adelgazantes. Sobre esto, la experta es más cauta: «aunque existen infinidad de estudios sobre las propiedades beneficiosas del té, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria todavía no ha emitido una opinión sobre muchas de ellas, por eso no estoy en posición de poder hacer un comentario al respecto».

Comenzó a consumirse en bolsitas por error, cuando un empresario americano comenzó a enviar muestras a sus clientes de pequeñas cantidades en bolsas de seda para que las probasen y estos pensaron que se utilizaba con la bolsa incluida.

Mucha gente también desconoce que, como los buenos vinos, el té también tiene sus maridajes, y son múltiples las combinaciones que se pueden hacer para disfrutar y potenciar más su sabor: el negro va perfecto con un brownie casero de chocolate, el verde con sushi, el rojo con las comidas picantes, el té con menta con la comida árabe y el de jazmín, para acompañar al pollo, por ejemplo.