Disfruta del verano con buenos ojos

B. López

EXTRAVOZ OK

Proteger los ojos del sol es una norma útil para disfrutar del verano, pero las playas y las piscinas también pueden irritarlos. Los expertos proponen algunas medidas para evitar daños

16 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Llega el verano, y con el calor, lo que más apetece es meterse en el agua y quedarse a remojo durante horas. El problema de la playa, y sobre todo de la piscina, es que puede provocar irritaciones en los ojos, pero no es el único factor que amenaza a los ojos en esta época, en la que estamos expuestos a muchas horas de luz solar más potente y también a sistemas muy fuertes de aire acondicionado.

 Todas estas situaciones pueden causar el deterioro de nuestra salud visual, y llegar a provocar incluso problemas graves. Empecemos por el agua, tanto la sal como el cloro de las piscinas pueden hacer que el blanco de nuestros ojos acabe rojo como el carmín, por lo que los expertos recomiendan utilizar siempre gafas adecuadas para evitar que nos entre agua. Los más afectados en este caso son los más pequeños, porque pueden pasarse horas dentro (y muchas veces debajo) del agua, y son más sensibles, especialmente los que tienen los ojos más claros. El cloro presente en las piscinas es una de las sustancias más irritantes para nuestra vista, ya que se trata de un producto desinfectante que está compuesto por sustancias que en alta concentración pueden llegar a ser muy tóxicas. Los especialistas aseguran que lo ideal sería que todas las piscinas utilizasen agua con sales minerales para que fuesen mucho mejor toleradas por los ojos, al ser más similares a los fluidos humanos.

Al tomar el sol

Entre los adultos, la precaución debe aumentar cuando nos disponemos a tomar el sol durante un período prolongado de tiempo. Sobretodo si lo hacemos sin gafas de sol. Si no nos damos cuenta el ojo puede quedar entreabierto y producirse una queratitis, que causa molestias importantes en la cornea, o también conjuntivitis. Por eso los expertos recuerdan que el uso de gafas de sol homologadas puede contribuir a evitar problemas de este tipo. En Centro Óptico Galego disponen de personal especializado para orientar al cliente en la compra de modelos de primeras marcas y de las últimas colecciones, que cumplen con la reglamentación en cuanto a filtros para evitar el daño de los rayos solares. La moda, en este caso, no está reñida con la calidad

Porque los expertos alertan cada año de los riesgos de utilizar modelos comprados en mercadillos sin ningún tipo de seguridad, que pueden llegar a dañar la vista. El Colegio de Ópticos-Optometristas de Galicia recuerda una vez más la necesidad de usar gafas en verano para evitar lesiones oculares. Para ello considera necesario el asesoramiento de un óptico-optometrista, profesional de la salud visual, cuyo consejo esa vital para escoger el modelo más adecuado en función de las actividades cotidianas y aficiones de ocio y deporte.

Dependiendo del lugar en el que se encuentre una persona recibirá más o menos cantidad de luz (por ejemplo, en el campo le llega un 3% de la radiación, y en la playa un 30%; mientras que en la nieve alcanza un 80% por la altitud y el efecto reflectante.

Por eso es recomendable proteger los ojos cuanto mayor sea la altitud, y, en cuanto al horario, sobre todo de 12 de la mañana a 5 de la tarde durante el verano. Además, los ópticos recuerdan que si el día está nublado no quiere decir que los rayos solares no vayan a afectar a nuestra visión, por eso insisten en la recomendación de llevar siempre a mano las gafas de sol homologadas.