Fantasías animadas

Javier Armesto Andrés
Javier Armesto REDACCIÓN

MOTOR ON

De ayer y hoy. De los homenajes vintage a las motos que rodaban en los 70 y 80 del pasado siglo a la revolución de los vehículos eléctricos y de tres ruedas. La feria EICMA demostró que el sector de la motocicleta también vive una revolución.

12 nov 2017 . Actualizado a las 08:41 h.

Segunda gran cita europea de la moto tras la feria Intermot de Colonia. El EICMA de Milán mostró esta semana numerosas novedades. Difícil por dónde empezar en un certamen donde se presentan modelos como la primera Vespa eléctrica o una naked de tres ruedas de estética apabullante, la Yamaha Niken. La marca japonesa ha renovado la Tracer 900, ahora más cómoda y viajera, con pantalla TFT en color, sistema de cambio rápido (QSS) para subir de marcha con suavidad, control de crucero y puños calefactables de serie.

KTM sigue por sus fueros deportivos con la 790 Duke, 105 caballos de potencia para solo 169 kilos, con luces led y cuatro modos de conducción, incluido uno denominado Track que se puede configurar personalmente.

Triumph llevó a la ciudad italiana sus nuevas trail Tiger de 800 y 1200, que elevan su equipamiento hasta el límite. La primera con puños y asientos (incluido el del pasajero) calefactables y la segunda con arranque sin llave y mandos retroiluminados. Ambas abandonan los relojes analógicos e incorporan un panel de instrumentos TFT ajustable de 5 pulgadas y aspecto discutible.

BMW se la juega con las F 750 GS y F 850 GS. Esta última sube la potencia de la anterior 800 a los 95 caballos y ambas llevan un nuevo bastidor de acero de construcción monocasco y cambian la ubicación del depósito de combustible. La marca alemana también presentó un nuevo escúter de media cilindrada, el C400X. Por su parte en Honda destaca la versión ¿definitiva? de la CRF1000L Africa Twin, con menos peso, mayor protección y suspensiones más largas.