Minisatélites «made in Galicia»

Raúl Romar García
R. Romar REDACCIÓN / LA VOZ

EXTRAVOZ RED

Oscar Vázquez

El Centro de Innovación Aeroespacial de Galicia diseñará y fabricará una constelación de 25 unidades cuyos datos serán explotados por una empresa que colabora en el proyecto. ?

28 may 2019 . Actualizado a las 19:57 h.

El 13 de febrero del 2012 fue un día histórico en Galicia. Fue, en cierto modo, la fecha que abrió la senda aeroespacial en la comunidad con el lanzamiento del Xatcobeo, el primer satélite made in Galicia, diseñado y construido por la Universidade de Vigo. Fue, en su momento, un reto tecnológico, una misión cumplida que, lejos de quedarse en algo anecdótico, inauguró el camino a nuevos desarrollos que han convertido a Vigo en un referente internacional en el desarrollo e investigación de nanosatélites, una vía ya madura y próxima a dar el salto a la industria. La prueba es el acuerdo firmado hace unos días entre el Centro de Innovación Aeroespacial de Galicia (Cinae), surgido a raíz del grupo universitario, la Axencia Galega de Innovación y la empresa catalana Aistech Space S.L., un convenio por el que se crea una unidad mixta de investigación que se plantea como objetivo el desarrollo de la tecnología necesaria para el diseño y fabricación de una constelación de satélites, integrada por 25 unidades, que serán explotados comercialmente para suministrar datos que permitan desde el control de incendios a la agricultura de precisión o el rescate de náufragos.

Socios tecnológicos

Galicia no solo aportará la tecnología, sino que la fabricación de los ingenios se realizará en Nigrán, adonde la empresa catalana trasladará su sede. «Nosotros somos los socios tecnológicos, pero toda la fabricación también se realizará en Galicia», constata Fernando Aguado, el coordinador de un proyecto en el que se invertirán para su puesta en marcha hasta el 2019 un total de 2,3 millones de euros, de los que la Xunta aportará el 30 %. «Pretendemos situar a Galicia na vangarda do sector e transformar a súa economía en economía do coñecemento», destaca Patricia Argerey, directora de la Axencia Galega de Innovación.

La iniciativa tiene una parte importante de investigación, ya que primero se desarrollarán dos satélites precursores, el primero de los cuales se lanzará en el 2019, con los que se quiere poner toda la tecnología a punto. En esta parte se perfeccionarán los procesos de verificación de las pruebas, de integración de los aparatos y de puesta a punto, de tal forma que el resto de las unidades de la constelación puedan fabricarse en serie.

«El objetivo final es que se pueda automatizar todo el proceso para que luego se puedan construir en cadena de una forma fiable, rápida y económica», apunta Fernando Aguado, el creador del Xatcobeo y embarcado ahora en una nueva aventura con capacidad para crear riqueza y trabajo en Galicia a partir de la tecnología espacial. «Nuestro objetivo -añade- es poner en marcha los satélites, pero de la explotación comercial de los datos se encargará Aistech Space».

Fernando Aguado: «Somos un referente mundial en pequeños satélites»

«Nosotros queríamos ofrecer desde Galicia soluciones tecnológicas a nivel mundial en el campo de los pequeños satélites. Y esto es algo que ya hemos conseguido, es una realidad. Somos un referente, no solo en España, sino también en Europa y en el mundo, pero queremos también abarcar más segmentos». Fernando Aguado, el director técnico del proyecto, es consciente de que aún le queda un largo camino por delante, pero con la experiencia adquirida considera que en el futuro también pueden dar el salto hacia los satélites de mayor tamaño y a otros segmentos del sector aeroespacial que aún no han desarrollado. Sus palabras están sustentadas por los hechos y por un trabajo constante en la última década que se vio refrendado en el 2012 con el lanzamiento del Xatcobeo. Desde entonces, y bajo el impulso inicial de la Universidade de Vigo, al primer nanosatélite gallego le siguieron el Humsat y el Serpens, que se desarrollaron en colaboración con instituciones de otros países. El próximo año pondrán en órbita su cuarto ingenio, el Lume 1, un proyecto experimental dirigido a combatir los incendios forestales dentro de un programa europeo que combina la tecnología de los cubesat con los drones y en el que también participan la Universidad de Oporto y el CNRS francés. A día de hoy, el 42 % de los satélites desarrollados en España y que fueron lanzados al espacio tienen su origen en Vigo, un porcentaje que subirá al 65 % entre el 2019 y el 2020 con la puesta en órbita de otros cuatro.