El bitcoin bate récords

David Serantes

EXTRAVOZ RED

Todavía hay personas que hacen el cambio a pesetas para grandes cantidades de dinero, cuando ya tenemos una nueva moneda en circulación: el bitcoin. Una de estas monedas virtuales generadas en Internet y que no precisa de intermediarios ya vale más de 10.000 dólares. Algunos se han lanzado sobre ella para hacerse millonarios y otros temen que sea una nueva burbuja. Bitcoin atrae la atención de todos.

02 jul 2018 . Actualizado a las 20:22 h.

Pagará con efectivo, tarjeta o bitcoins?». Esta cuestión, que por ahora es poco probable que haya llegado a nuestros oídos, ya es realidad en un café de la ciudad californiana de Palo Alto. En el Coupa Cafe aceptan bitcoins como moneda de pago desde hace más de cuatro años y por supuesto todos los precios se muestran en dólares americanos y en bitcoins.

Además del nombre de la moneda, que va con minúscula, el término Bitcoin también se refiere a la red que soporta este intercambio de moneda entre usuarios sin la interferencia de una autoridad central que pueda rastrear las transacciones que se llevan a cabo. La tarea de supervisión existe, pero se realiza de forma colectiva por la misma red. Algo que atemoriza a muchos y que ha sido visto como una oportunidad por otros, que ya hacen todos sus negocios a través de esta red monetaria. A priori, la semejanza que más nos puede tranquilizar es la del correo electrónico; utilizado por una parte importante de la población mundial, no está en manos de nadie en concreto, sino que es un sistema de envío de información soportado en este caso por la red de redes, Internet.

Bitcoin ha salido a relucir en los medios y en las conversaciones de café en cada ocasión en que el valor de la moneda ha alcanzado barreras psicológicas como la de los 10.000 dólares, a los que ha llegado hace poco más de una semana. Pero no se ha parado ahí, sino que en el momento de escribir este artículo el índice de Coindesk estima que el bitcoin vale nada menos que 14.209 dólares. Toda una escalada vertiginosa que muchos califican como burbuja y además como temporal. Los expertos piensan que es necesaria una moneda de Internet, pero no ven que el bitcoin vaya a ser la definitiva, y creen que antes o después aparecerá una moneda oficial para la Red.

La red Bitcoin tiene algunas ventajas muy relevantes, sobre todo para los comerciantes, que encuentran que las transacciones realizadas son muy seguras por ser irreversibles, además de que no contienen datos personales y privados de los clientes. También les aporta la posibilidad de comenzar a operar en mercados donde las tarjetas de crédito no están disponibles o donde los niveles de fraude sean muy elevados. También para los usuarios se encuentra el aliciente del control total sobre sus transacciones, ya que es imposible que los comerciantes pasen pagos no deseados como sucede con otros métodos. Quizá lo más importante es que se ofrece un alto nivel de protección del dinero de los usuarios gracias a las copias de seguridad y encriptación. Bitcoin es confiable porque es completamente neutral, transparente y fiable.

Si tuviésemos que poner alguna pega al protocolo Bitcoin estaría en el nivel de aceptación por parte de las personas. Aunque ya son muchos los negocios y marcas en Internet que aceptan pagos con bitcoins, todavía no es muy conocido y necesita crecer para sacar beneficio del efecto red. Por otra parte, el valor total de bitcoins en circulación es pequeño en comparación con lo que podrá alcanzar. Es una moneda que está naciendo y es muy difícil prever qué es lo que pasará con ella. El software de Bitcoin está en fase de desarrollo y crecimiento para que llegue a las masas. Todavía no está listo para el gran público, está en una fase de maduración que, aunque será muy rápida, tardará en ser aceptada por los usuarios de a pie.

Cualquiera puede descargar una app que sirve como monedero de Bitcoin desde la App Store de Apple o la Play Store de Google y a partir de ahí hacerse con bitcoins. Lo más sencillo es comprando algunos en una casa de cambio de Bitcoin; también como resultado de un pago por bienes o servicios, comprando directamente a alguien de la zona donde uno vive. La forma más compleja sería fabricándolos uno mismo con el proceso competitivo de la minería de bitcoins, para lo que se requieren potentes equipos de hardware, software específico y además tiempo y mucha energía para resolver los problemas matemáticos que están detrás de la seguridad de la red de Bitcoin.

Bitcoin es posible que pierda fuelle en los próximos meses y que la demanda existente no se mantenga al mismo ritmo. Sin embargo es el inicio de un movimiento en el que los intermediarios de las transacciones tradicionales observan cómo se quedan fuera del mercado y donde el creciente mercado de Internet encuentra una forma de hacer pagos más directa, sin identificación de los datos privados de los usuarios. Pronto veremos cómo podremos pagar en nuestros comercios de confianza en bitcoins y cómo tener una cartera en nuestro smartphone será tan natural como operar con la app de nuestro banco.