Algunos establecimientos ya lo tienen todo lleno para determinadas fechas y, de momento, el anuncio de la reducción de comensales por mesa no ha provocado anulaciones
25 nov 2021 . Actualizado a las 09:24 h.La pandemia del coronavirus borró del mapa las cenas de Navidad de empresas, amigos y compañeros de trabajo el año pasado, pero en este 2021 las agendas de los hoteles y restaurantes de la zona se han vuelto a llenar de reservas para celebrar este tipo de convites. Y eso a pesar de que los contagios van en aumento y la Xunta acaba de anunciar que el número máximo de comensales por mesa se limitará a ocho personas en el interior y a quince en terraza (una medida que podría entrar en vigor este fin de semana), manteniendo, eso sí, los mismos aforos y horarios.
Aunque no todos los hosteleros se muestran igual de optimistas, lo cierto es que algunos ya casi no tienen mesas disponibles para las fechas más demandadas —los días 10, 11, 17 y 18 de diciembre—, y en general, el sector encara la campaña con «buenas expectativas».
En el Parador de Turismo de Ferrol, por ejemplo, «la situación es muy parecida a la de Navidad del 2019», según asegura el director, José Antonio Cedena. «Llevamos recibiendo peticiones de reservas desde principios de este mes y a estas alturas ya tenemos todo lleno en algunas fechas, como el 17 de diciembre», comenta.
En cuanto al número de comensales, Cedena señala que tienen reservas para grupos de 25, 30, 40 o incluso 110 personas y asegura que de momento no ha habido anulaciones. «No creo que la medida de reducir a ocho el número de comensales por mesa nos vaya a afectar, porque simplemente habrá que poner más mesas y tener más repartida a la clientela. Otra cosa sería que la situación empeorase en los próximos días y se redujesen los aforos, porque entonces seguramente a la gente le entraría el miedo y se lo pensaría más», señala Cedena.
Desde el Gran Hotel Ferrol, su director, Gonzalo Jiménez, asegura que las reservas para las cenas de Navidad van a «muy buen ritmo». Y también con buenas perspectivas afrontan la campaña en el restaurante Casa Maruxa del Cantón, donde ya hay varios grupos confirmados para los días 3, 11 y 18 de diciembre e incluso también para este viernes, 26 de noviembre. Su responsable, Gabriel Prego, no se atreve a lanzar las campanas al vuelo, aunque está convencido de que se podrá «trabajar bien» si no se imponen nuevas restricciones ni limitaciones de aforo. Y en cuanto a la obligación de presentar el certificado covid en la hostelería (la otra medida que está pendiente de entrar en vigor junto con la reducción del número de comensales por mesa), cree que en su caso no les afectará, ya que la media de edad de su clientela está por encima de los 35 años y en esa franja «casi todo el mundo ya está vacunado».
También ilusionada se muestra Marisol Buceta, que comanda el restaurante El Foro de la plaza de España. El establecimiento abrió sus puertas el 20 de diciembre del 2019, por lo que no llegó a tiempo para las cenas de empresa prenavideñas de aquel año, y en el 2020 tampoco las pudo albergar a causa de la pandemia. «Esta es la primera vez que estamos teniendo reservas para cenas de este tipo y la verdad es que estamos muy contentos porque está habiendo mucho interés. Para los días 9, 10 y 17 de diciembre ya lo tengo casi todo lleno y también lo tengo todo completo para el aperitivo-comida del día 24», explica la hostelera, que también ofrece el servicio de catéring.
Julián Freire, de la cafetería-restaurante Boss de Esteiro, se muestra menos optimista, porque aunque ha recibido muchas llamadas solicitando información para cenas navideñas en grupo, pocas «han cuajado» de momento. Con todo, confía en que los próximos días se vayan confirmando las reservas, porque es probable que «mucha gente espere a última hora», para ver cómo evoluciona la situación. «Lo importante es que no nos vuelvan a cerrar y podamos trabajar con normalidad. Con eso ya me doy por contento», concluye esperanzado el hostelero.
Terrazas calefactadas que cotizan al alza y banquetes con baile por la tarde
Si antes de la pandemia nadie o casi nadie se planteaba organizar una cena de empresa de Navidad en el exterior, ahora es una opción que cotiza al alza, siempre y cuando se pueda disponer de una terraza bien equipada y protegida del frío y la lluvia. Así lo aseguran al menos desde establecimentos como el restaurante Urimare de Xuvia, en Narón, donde cuentan con una terraza calefactadas. ««Con el covid ha aumentado muchísimo el interés por reunirse en el exterior y, ahora, con estas nuevas medidas, la terraza ofrece la ventaja de poder reunirse hasta 15 personas en una mesa», advierte Suso Varela desde el establecimiento de Xuvia.
Otros establecimientos, como Illas Gabeiras, han optado por adaptarse a la situación y cambiar su modus operandi para atraer a más clientes en estas fechas. Además de contar con un potente sistema de ventilación para mantener los niveles de CO2 a raya en todo momento, el salón de banquetes de Serantes ha decidido cambiar las típicas cenas-baile de estas fechas por comidas-baile, ante la imposibilidad de abrir más allá de la una y media de la madrugada, algo que antes sí tenían permitido. «De esta forma, la gente puede venir a comer y disfrutrar después de tres horas de baile sin prisas o incluso hasta la medianoche si hay demanda», comenta el responsable, Miguel Ángel Campos, que también comanda el restaurante A Gabeira en Valón.
En cuanto a los precios de los menús, la mayoría de los establecimientos aseguran que no se han encarecido y se mantienen entre los 25 y los 45 euros por persona. En el Gran Hotel oscilan entre los 28 y los 40 euros, mientras que en el Parador de Turismo de Ferrol se ofertan por 30, 33 y 35.