«Vine porque tenía miedo de acabar en la cárcel»

Bea Abelairas
Bea abelairas FERROL

FERROL CIUDAD

JOSE PARDO

03 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Beatriz Chippy tiene 24 años y salió de Venezuela para evitar la cárcel. Primero recaló en Tenerife durante ocho meses, ya que su madre es canaria, pero en las islas se vio incapaz de encontrar trabajo, así que puso rumbo a Ferrol para reunirse con unos amigos: «En Venezuela tenía mi empresa, pero primero se deterioró la situación económica y después todo lo demás. Me vine porque tenía mucho miedo de acabar en la cárcel, siempre he sido una radical opositora a este régimen y formo parte de lo que nosotros llamamos resistencia, que son los jóvenes que salimos a la calle a protestar. Todos mis amigos se han tenido que marchar, unos están en Chile; otros en lugares más lejanos...», resume esta joven que tiene claro que perdió su trabajo por motivos políticos. Sus últimos meses en su país de nacimiento fueron muy duros, repletos de continuos acosos de la policía.

En Venezuela todavía tiene a sus padres, con los que se comunica a diario, al igual que con otros allegados y en Ferrol ha encontrado un empleo y ayuda, pero reconoce que hay muchos compatriotas que suman la penuria económica al exilio. Ella ha podido recurrir a la nacionalidad española gracias a su madre, pero reconoce que la mayoría no siempre tiene esta posibilidad. «La situación allí está realmente mal», explica.

Sin pensión 23 meses

En casa de Óscar Gómez también sufren las consecuencias de la salida del país, una de sus hijas ha tenido que volver a la universidad, porque no puede homologar su carrera de Medicina, ya que el gobierno no se lo facilita, y la otra casi ha renunciado a ella: «Trabaja en lo que va saliendo, a veces en cafeterías, otras en servicios de limpieza, pero tampoco puede usar sus estudios de recursos humanos aquí».

En el caso de Óscar pudieron regresar amparándose en la nacionalidad de su mujer, ya que su padre era canario, pero acusan un grave problema derivado de la situación de Venezuela: «Llevamos 23 meses sin cobrar nuestra pensión y estamos como los que llegan aquí sin nada», explica este hombre que espera poder ayudar a otros compatriotas con una plataforma para atender a gente que se escapa del régimen de Maduro. «Las cosas estaban muy mal hace meses y ahora con lo que han hecho solo se han empeorado. Los que podemos acogernos a la nacionalidad española tenemos una salida -reconoce-, pero el resto no sé que puede hacer porque las cosas solo van a empeorar».