Un ferrolano en la cúpula de la Marina

FERROL CIUDAD

ANGEL MANSO

Manuel Garat, que dejó una profunda huella como almirante del Arsenal, enfrenta ahora un nuevo reto

26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El almirante Manuel Garat Caramé (Ferrol, 1957) continúa dando pasos adelante en el marco de una trayectoria ascendente en la cúpula de la Marina española.

En el último Consejo de Ministros se dio luz verde al real decreto por el que se le nombró segundo jefe del Estado Mayor de la Armada, un puesto de máxima responsabilidad dentro del Ministerio de Defensa para el que Garat Caramé acumula una gran carga de experiencia a sus espaldas.

Es ferrolano por los cuatro costados y de ello ejerce siempre que tiene oportunidad. Buen conocedor de los entresijos de la Marina, también lo es de la sociedad local y del vínculo existente entre Ferrol y la Armada.

De su largo currículo cabe destacar que ha estado destinado en la fragata Extremadura, en la corbeta Infanta Cristina y en los cazaminas Ebro y Guadalete, cuyo mando desempeñó, y en el Cuartel General de las Fuerzas Aliadas del sur de Europa, con sede en Nápoles. Fue comandante de la fragata Almirante Juan de Borbón y de la Jefatura de Órdenes de la 31 Escuadrilla. Ha sido almirante jefe del Arsenal de Ferrol y almirante de la Fuerza de Acción Naval, y actualmente era asesor del gabinete técnico del Subsecretario de Defensa.

Como se puede comprobar, muchos de sus destinos han estado directamente vinculados a la ciudad naval. Dejó honda huella ferrolana al frente de la fragata Almirante Juan de Borbón, hizo lo propio cuando estuvo al mando de la 31 Escuadrilla de Escoltas -donde se integran todas las fragatas F-100- y, especialmente, en su etapa como almirante del Arsenal.

Manuel Garat Caramé es un firme defensor de la necesidad de que la Marina se abra cada vez más a la sociedad civil, algo especialmente importante en Ferrol. De ello da buena prueba, por ejemplo, su intensa labor para poder permitir las visitas del público al Palacio de Capitanía, recinto en el que se esconden verdaderos tesoros y grandes historias que, durante muchos años, estuvieron ocultas a los ciudadanos. Cultivó bien desde el Arsenal las relaciones con los máximos representantes de la sociedad civil y, ahora, enfrenta un nuevo reto dentro de la cúpula estratégica de la Armada.