Los responsables portuarios aseguran que el impacto en las corrientes será nulo
26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Un viaducto de 300 metros de longitud permitirá salvar la ensenada de A Malata en la conexión ferroviaria entre los dos puertos de Ferrol. La estructura se complementará con una pasarela peatonal de tres metros de ancho y para su construcción se empleará un sistema novedoso en la ejecución de las cimentaciones.
El impacto sobre las corrientes de la ensenada de A Malata será nulo, según indicó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao, José Manuel Vilariño, en el acto de inicio de las obras de construcción del acceso ferroviario al puerto exterior de Caneliñas, al que asistieron el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, y el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, entre otras autoridades.
Según los técnicos de la UTE formada por Copasa, Ogmios y Geotunel, adjudicataria de las obras, el viaducto de A Malata contará con cinco vanos de 60 metros de ancho cada uno y tendrá un canal de navegación de nueve metros.
De las seis pilastras que sustentarán el viaducto cuatro estarán ubicadas sobre la ensenada y supondrán una perforación de 26 metros por debajo del lecho marino. Las dos restantes se fijarán en tierra firme, una en A Graña y otra en las propias instalaciones de la rada interior.
La construcción de esta infraestructura no supondrá ninguna alteración de las corrientes marinas, cuestión que los responsables portuarios se encargaron de confirmar a través de varios estudios, uno de ellos de la Universidad.
En el acuerdo suscrito en su día con la Xunta de Galicia para la ejecución de esta importante infraestructura se recoge, y así se hizo constar también ayer, que la realización de los trabajos del viaducto no interferirá en la actividad del marisqueo, porque la obra se programará en función de las vedas y períodos inactivos de los trabajadores del mar.
Entre las ventajas que los responsables del proyecto destacan de la nueva conexión entre los dos puertos de Ferrol figuran las de carácter medioambiental. En este sentido, el propio presidente de la Xunta reseñó ayer que un tren puede sustituir a 40 ó 50 contenedores o camiones, apuntando que en la actualidad hay un movimiento diario de 1.000 vehículos de transporte pesado en la actividad portuaria de Ferrol.
El ministro de Fomento también incidió en el aspecto medioambiental del proyecto del tren al puerto de Canelinas, al asegurar que, además de un medio de transporte sostenible y de aumentar la competitividad, contribuye a la reducción de las emisiones de CO2.
Entre los beneficios medioambientales del ferrocarril se destaca la reducción de CO2
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