La embajadora nómada de Pinocho recala en Pontedeume

BEATRIZ ANTÓN FERROL / LA VOZ

PONTEDEUME

JOSE RIOS

Catarina Capim llega a la villa de los Andrade para acercar a los niños la famosa fábula de Collodi a través de un proyecto con el que lleva tres años recorriendo España y Portugal

22 sep 2017 . Actualizado a las 09:56 h.

De espíritu nómada y con una enorme vocación educativa, Catarina Capim es una artista que no quiere ni sabe estarse quieta. Nacida en Brasil en el seno de una familia de emigrantes italianos y sirios libaneses, en el 2012 decidió trasladarse a vivir a Italia -de donde es su marido, Julian-, pero dos años más tarde le entraron de nuevo las ganas de ver mundo y fue entonces, en el 2014, cuando comenzó un periplo que le ha llevado a recorrer diferentes ciudades de España y Portugal con un original proyecto educativo. El invento se llama Pinocchio sono io, Pinocho son eu, Pinocho soy yo -por su carácter internacional fue bautizado en tres lenguas- y no es otra cosa que una exposición «interactiva» y «sensorial» con la que pretende acercar a los niños las enseñanzas de la famosa fábula escrita por el italiano Carlo Collodi a finales del siglo XIX.

Tras pasar por Valencia, varias localidades situadas al sur de Lisboa y Portosín, el proyecto recala desde hoy y hasta el 30 de septiembre en la Casa da Cultura de Pontedeume, donde podrá ser visitado, de la mano de la propia Capim, por alumnos de Infantil y Primaria de Cabanas, Pontedeume, Monfero y A Capela.. Y también por todos aquellos niños (y no tan niños) de otros municipios que quieran empaparse de los valores que se esconden en las páginas de la célebre obra literaria.

«¡Es que los personajes de Pincho tienen que mucho que enseñar, porque son como la vida misma!», resume el bibliotecario de Pontedeume, Alejandro Caínzos, quien ha colaborado activamente con Capim para que la exposición se pueda ver en la Casa da Cultura. Ella secunda sus palabras y asegura que el principal valor de la Storia di un Burattino -como se publicó originalmente Las aventuras de Pinocho- reside en que se trata de un libro que «ayuda a crecer». «Pinocho se va encontrando con muchos desafíos, tiene que madurar para poder avanzar y, en ese sentido, la obra muestra que la vida es un camino de transformación, de permanente evolución», apunta Capim.

JOSE RIOS

Pero, ¿de qué manera traslada la brasileña todas esas enseñanzas a los niños? Pues lo hace con una exposición que también es un juego, porque en ella los niños pueden tocar y manipular las obras «interactivas» realizadas por Catarina echando mano de papel, cartón y otros materiales reciclables. «Cada pieza representa un símbolo de la historia y a través de ellas los niños pueden vivir las aventuras de Pinocho a través de su propio punto de vista», explica Capim.

Además, se trata de un proyecto muy cambiante, porque la exposición va variando a medida que va avanzando su periplo por España y Portugal. Eso explica que Catarina y su familia -en esta aventura también le acompañan su marido y su hijo- lleven ya seis meses viviendo en Pontedeume. «Cuando visitamos un lugar, no nos gusta llegar y marcharnos sin más, sino que siempre nos quedamos unos cuantos meses para conocer a la gente, contactar con los colegios, comprender la visión que se tiene en cada sitio de la educación... Además, para cada exposición hago obras nuevas y ese proceso creativo me lleva unos tres meses», anota una escultora que ha hecho del arte en papel una de sus principales pasiones.

Sin querer desvelar demasiado su contenido, Catarina avanza que lo más divertido de la exposición son sus narices -las hay feas, grandes, bonitas y divertidas, «porque no todas las mentiras son iguales»- y anima a todo el mundo a visitarla, sobre todo a aquellos padres que quieran transmitir a sus hijos el placer de la lectura: «El objetivo es que los niños salgan corriendo a la biblioteca después de ver la exposición».

EN CORTO

Apoyo. Catarina Capim ha realizado la exposición que se puede ver en Pontedeume en colaboración con la Fundación Carlo Collodi.

Arte en papel. El proyecto consiste en una exposición interactiva de arte en papel. Se puede visitar hasta el día 30, de 10.00 a 13.30 horas, en la Casa da Cultura de Pontedeume.