José Mota aterriza el próximo 23 de febrero en A Coruña con Florentino Fernández y Santiago Segura con un espectáculo que tiene las risas aseguradas
15 feb 2019 . Actualizado a las 23:25 h.Tres genios del humor se juntan por primera vez en un escenario con el show El sentido del humor: Dos tontos y yo. Santiago Segura, Florentino Fernández y José Mota nos ofrecerán su particular versión sobre el sentido del humor, algo de lo que van sobrados.
-«Dos tontos y yo». A mí me gustaría saber ¿quién presenta el espectáculo?
-[Risas]. Se dice varias veces, pero es una frase hecha, no alude a nadie y con eso jugamos.
-Hacéis un análisis del sentido del humor, ¿no?
-Es como una especie de ponencia en torno al humor, a la risa, a cuándo empezó todo, el primer chiste de la historia, colores del humor: blanco, negro, verde... Los ejemplos que ponemos en cada uno de los temas que tocamos, son los que disparan la comedia. Ponemos ejemplos del humor verde, del negro, o cada uno damos nuestra versión sobre el primer chiste de la historia.
-Menudo trío.
-Sí, juntos de nuevo por primera vez, dicen nada más empezar.
-¿Podéis tener una conversación seria?
-La verdad es que somos bastante gansos. Difícilmente, algunas veces, pero tratamos de pasarlo bien.
-¿Se parece el sentido del humor de Santiago Segura y Florentino Fernández al tuyo?
-Yo creo que Santiago es más especialista en la ironía, es francamente fino manejando esta herramienta, es un tío superrápido, y Florentino es un tipo de vis cómica innata incontestable. Cada uno representamos una cosa.
-Dicen que tú haces un humor muy elaborado.
-Trato de devolver al espectador lo que me lleva dando estos 30 años. Intento hacer un trabajo lo más serio posible, tanto en los fines de año como en el cualquier trabajo que hago. No sé si esto me puede caracterizar, pero autodefinirme me da vergüenza.
-Tal y como está el patio, ¿tú crees que se puede seguir haciendo humor sin pensar en los juzgados?
-Es muy complicado, es verdad que el humor está transitando cada vez por pasillos más estrechos, y eso es una pena porque creo que al humor no hay que tenerle miedo. Hay que pensar que es un arma de construcción masiva que sirve para unir y creo que nos hace libres. No es bueno tener miedo al humor. Una sociedad que abraza el humor es socialmente más sana, bajo mi punto de vista.
-Hay que encontrar el punto que haga reír sin que otros se enfaden. Complicado.
-Es muy difícil, porque ¿dónde está el punto exacto? Es complicado. Si tú me preguntas si yo pondría letreros de «prohibido» o puertas de «prohibido» al humor, yo no. De la misma manera, creo que cada artista tendrá su propio código ético, pues esto me apetecerá hacerlo y esto no. ¿Que estamos atravesando un momento mundial de dificultad porque el discurso de lo políticamente correcto ha secuestrado al humor? Es verdad, pero las cosas no son tan sencillas, porque de la mano también han venido logros sociales. También se trampea mucho juzgando hoy las cosas que se hacían hace veinte o treinta años. Eso es trampear. Yo creo que las cosas hay que sobredimensionarlas acordes al momento en que se hicieron.
-¿A qué le haces cruz y raya en esta vida?
-Con el paso de los años cada vez me apetece menos el ruido, ruido que molesta. Me apetece pasármelo bien en los proyectos que hago, hoy me pesa más eso que los réditos económicos que me pueda dejar. Si luego, como en este caso, es un bombazo, no puedo pedir más. Es un regalo.