Caballo Prieto Azabache: «Siempre digo que somos un grupo, al menos, medio gallego»

FUGAS

Debuta en Galicia, tierra de su cantante Quique Cruzado, este grupo que cuenta con la bendición de Joe Crepúsculo y Xoel López

07 ene 2022 . Actualizado a las 11:58 h.

Que el nombre no lleve a confusión. Caballo Prieto Azabache no hace rancheras ni nada que se le parezca. Si hay que buscarle alguna conexión sónica, hay que tirar por el pospunk de los ochenta, por los sonidos fríos de New Order mezclados con una vitalidad que al que firma le recuerda a Devo. «Pues te agradezco la referencia, me encanta, pero te aseguro que nunca lo había pensado», aclara Quique Cruzado, coruñés que ocupa el puesto de cantante y guitarra rítmica, además de ser el miembro que ha resistido a diferentes cambios de formación desde su origen. Tienen un epé editado y sacan disco en las próximas semanas bajo el título de Nº1, un trabajo del que hemos escuchado un puñado de singles que se instalan en el hipotálamo en la primera escucha y ya es imposible sacarlos de ahí. Lo comprobaremos esta noche en el Garufa Club, de A Coruña, donde compartirán escenario con Gitano de Palo.

­—Al margen de las inevitables referencias, han conseguido tener un sonido muy identificable.

—Sí, eso pretendemos. Y me temo que la voz juega un papel crucial en esto, es bastante peculiar. Tener una seña de identidad que te distinga está muy bien. Cuando te pones a componer, es inevitable que salga lo que has escuchado. Yo he vuelto a los grupos que me gustaban en los ochenta, y me tira que nuestra música tenga un toque reconocible de la música de entonces, más pospunk, más oscuro. Pero, por otro lado, he sido muy fan toda la vida de Los Planetas y escucho mucho a grupos como Cala Vento, Él Mató a un Policía Motorizado o Bestia Bebé. Todo se notará, supongo.

­—¿De dónde sale el grupo?

—Llevo 18 años viviendo fuera de A Coruña, primero en Barcelona, luego en Mallorca y ahora en Madrid. En Mallorca tuve la suerte de hacerme amigo de Joe Crepúsculo, que volvió a meterme el gusanillo que había tenido desde joven con el tema de la música. Y en el 2018, ya en Madrid, di con unos amigos que también querían montar algo. Empecé a componer, vi que salían cosas y de ahí salió Caballo Prieto Azabache.

—Curioso nombre...

—Es el título de una ranchera de Antonio Aguilar. Era la canción favorita de mi abuela, y en Barcelona tenía la broma con unos amigos de decir que teníamos un grupo que se llamaba así. Sonaba bien.

­—A pesar de su todavía breve vida, ya han sufrido varios cambios de formación.

—Sí, parece que no hay quien me aguante [ríe]. Tras el primer epé (Madrid, agosto, 40°), tuvimos un cambio de guitarrista, batería y teclista. Ahora somos un peruano, dos madrileños, una granadina y yo, gallego. La cuota gallega no es tan amplia, pero siempre digo que somos un grupo, al menos, medio gallego.

­—Mencionaba a Joe Crepúsculo, que ha colaborado en su canción «Cenicero».

—Es una canción que celebra la amistad que tenemos desde hace diez años. Él produjo el tema. Bueno, la verdad es que le llevé la letra y una base y él nos lo montó, lo terminó. La última estrofa viene de una canción de Gran Amant, el grupo de Gerard Armengol, que es quien nos presentó.

—Y también han contado con Xoel López en otro tema.

—Soy muy amigo de su hermano y llevaba un montón de tiempo queriendo hacer algo coruñés. A Xoel me lo encontraba continuamente, cuando el Dépor estaba en segunda, en campos como el del Alcorcón. Le propuse participar en esta canción y, como es de las mejores personas que hay en este país, dijo que sí. Para nosotros es increíble. El número de escuchas que tiene el tema en las plataformas digitales es infinitamente mayor al resto.

­—La canción se titula «Magnate y mecenas» y habla de Amancio Ortega.

—Viene de una noticia que había sacado el diario The Sun sobre si Amancio Ortega era el dueño del Dépor. Así que nos montamos la película de qué pasaría si fuese verdad. Ahora mismo el presente del Dépor es muy prometedor, no cambiaría nada. Pero, si llega el momento de necesidad, no veo a nadie mejor que pueda hacerse cargo como mecenas.

­—A pesar de su origen coruñés, es su debut en casa.

—Teníamos dos fechas para tocar en el verano del 2020, en el Náutico de San Vicente y en la plaza de Azcárraga, dentro de las fiestas de María Pita, en A Coruña. Pero se fastidió todo con el covid. A ver qué pasa este año...

  •  A Coruña. Garufa Club. 21.00 horas. 10 euros