Vanessa Souto: «Máis que heroes somos uns currantes, hai moito que pelexar cada día»

En una ciudad rodeada por las moles urbanísticas consagradas al consumo, la apuesta de esta empresa familiar dedicada a las golosinas y a los dulces, Chuches Xiana, fue la calle, lo local, el trato cercano con el cliente. Tienen ocho tiendas en A Coruña. De ellas, solo una está en un centro comercial, en el Marineda. «É no que nós cremos. No comercio de proximidade. Non queremos que se perda o contacto coa xente», defiende Vanessa Souto Calvete, la encargada de los locales.

«Acabamos de abrir tenda no centro, é onde queríamos estar. Pensar nesta cidade é pensar nesta rúa»

Acaban de abrir el octavo establecimiento. Nada menos que en una de las calles más importantes para el comercio en A Coruña, la calle Real. Una vía peatonal que pasó por épocas mejores. La bajada de persianas parece que se invierte. Los alquileres, denuncian los comerciantes, vuelven a estar por las nubes. Fenómenos como el top-manta, añaden algunos, tampoco ayudan. «É un avance para nós. Temos outras sete tendas na Coruña e Arteixo pero, pensar nesta cidade, é pensar nesta rúa. Queríamos estar aquí», apunta Vanessa Souto.

Abrir una pequeña tienda, con el pago de facturas que supone: licencia, alquileres, luz, seguridad social... es casi un empeño heroico. «Máis que heroes, somos uns currantes, hai moito que pelexar cada día», admite Vanessa. Internet es omnipresente y las grandes superficies son un imán para los compradores. «Isto non é só unha transacción de compra e venda. Creamos unha relación, mesmo pasamos a formar parte da vida de moitos clientes. Ese vínculo é o máis gratificante», subraya.

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