Casi un cuarto de los nuevos barcos de recreo se matricularon en Galicia

e. abuín REDACCIÓN / LA VOZ

LA GALICIA ECONÓMICA

RAMON LEIRO

La patronal de la náutica constata un frenazo en la compra destinada al alquiler

11 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

De las 177 embarcaciones de recreo más que se matricularon durante el 2018 en España, 40 (un 22,5 % del total) se dieron de alta en Galicia. Aún sin poder medirse con Cataluña y mucho menos con las islas Baleares, motor absoluto del negocio el año pasado, la comunidad mostró un dinamismo sorprendente, al crecer un 12,19 %, cuando en el ejercicio precedente había caído un 8,7 %.

Pontevedra, con 191 nuevas unidades, fue la provincia gallega que más embarcaciones deportivas matriculó en el 2018, seguida de A Coruña, con 161. Lugo, por su parte, tuvo una tendencia negativa y botó tres buques menos de la veintena que había bautizado en el 2017, mientras que Ourense vio crecer en tres su censo.

En total, 378 nuevos barcos de recreo llevan matrícula gallega, 50 más que el año pasado, según el balance anual de la Asociación Nacional de Empresas Náuticas (ANEN), realizado con datos de la Dirección General de la Marina Mercante.

Un 3,3 % más

Las embarcaciones de menos de seis metros son las que más salida tienen en el mercado A nivel nacional, el censo de buques deportivos -en los que se incluyen yates, veleros, catamaranes, motos de agua y demás- incorporó 5.545 embarcaciones, un 3,3 % más con respecto al año anterior. De ese total, 4.037 (el 76,5 %) son embarcaciones de la séptima lista; esto es, unidades destinadas a uso privativo. Es, según destaca la patronal del sector náutico, el mejor resultado de los últimos tres años, aumentando un 7,5 % con respecto al año anterior. Esta tendencia rompe la que se venía detectando desde hace unos años, en los que aumentaban las matriculaciones de embarcaciones para dedicarlas al alquiler. Así, durante el pasado ejercicio, las incorporaciones a la sexta lista -esa que incluye las que están destinadas al chárter- cayeron un 6,5 %. Se eclipsa de esta manera el despunte histórico que se venía registrando en este segmento del mercado desde el 2014.

Destinadas al alquiler se dieron de alta 1.508 embarcaciones, con lo que ANEN da por estabilizado un mercado que en aquel año «experimentó un crecimiento histórico del 60 %».

Menos de seis metros

Ahora bien, el barquito que compra un español es eso, un barquito chiquitito. Y es que los que más salida tienen miden menos de seis metros. Veinte veces más pequeño que el yate del emir de Catar que arribó hace unas semanas a Vigo. Aquel rango de eslora, con 3.846 matriculaciones el año pasado, fue el que más incorporaciones tuvo en términos absolutos, aunque estuvo por encima el crecimiento porcentual que registró el segmento comprendido entre los seis y los ocho metros. Con 1.099 altas, el aumento fue de un 15,1 %. Además, 180 personas en España tienen desde el año pasado un barco nuevo que mide entre los 12 y 16 metros de eslora. Por encima de ese rango, se mantuvieron en las 69 embarcaciones, igual que el ejercicio precedente.

El «barquito chiquitito» que se compra el español aficionado a la náutica deportiva

 

Que el aficionado a la náutica de recreo en España es de barquito chiquitito lo demuestra el hecho de que el 89,2 % de las embarcaciones matriculadas el año pasado tienen menos de ocho metros de eslora. Es ese segmento el que domina el mercado náutico en España. Y no solo para uso particular. Los barcos de menos de 8 metros son los más demandados también para el alquiler. Representan el 84,1 % del mercado del chárter náutico, área en la que las matriculaciones que más se han incorporado al censo son las que van de seis a ocho metros (10,6 %), mientras que han caído las que se corresponden con barcos de dimensiones superiores a los 16 metros (-17,6 %).

Más motos de agua

Por tipos de mercado, las mayores altas del año pasado se dieron en las motos de agua. Crecieron un 13,3 %, por delante de las embarcaciones neumáticas plegables, que aumentaron un 4,3 %, y de los veleros, que han subido un 1,9 %. Discreta fue la mejoría de los barcos a motor, pues solo se matricularon nueve más (0,4 %). Con todo, estos últimos siguen siendo los más demandados, con una cuota de mercado del 43,1 %. El signo negativo se lo llevan las lanchas neumáticas semirrígidas, que retrocedieron un -2,8 % en el 2018. La mayor parte de las nuevas altas navegan por aguas de las islas Baleares. Esta comunidad se situó en el 2018 a la cabeza del mercado náutico español, con una cuota de mercado del 20,16 % y con un crecimiento de sus matriculaciones. Cataluña cae a la segunda posición por cuota de mercado (18,78 %), mientras caen sus altas (-13,68 %). En el tercer puesto se mantiene Andalucía (17,94 %).