Una inmobiliaria de lujo cántabra ya visitó el pazo de Meirás con posibles compradores

Dolores Vázquez A CORUÑA / LA VOZ

GALICIA

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La Xunta rechaza caer en trampas y peleará para que sea público

24 feb 2018 . Actualizado a las 23:38 h.

La inmobiliaria cántabra Mikeli Luxury Real Estate comercializa el pazo de Meirás por 8 millones de euros y lo publicita en su web y con un vídeo en YouTube con imágenes del NO-DO en las que se ve a Francisco Franco en el inmueble. Esta firma recibió el encargo hace tres semanas, y su gerente, Antonio Avilés, indica que lo incluyen en su catálogo después de haber trabajado con anterioridad con los propietarios. La inmobiliaria ya ha mostrado el pazo a posibles compradores, aunque alega motivos de confidencialidad para reservarse el número de ofertas recibidas. «Se le pueden dar muchos usos, desde un pequeño hotel de lujo a un restaurante selecto, o un capricho para quien quiera algo representativo», explica Avilés sobre los posibles destinos del recinto, que considera que «está por debajo del precio de mercado» para un inmueble de sus características. La inmobiliaria define la propiedad como «un lugar emblemático y muy conocido no solo en España, sino también fuera de nuestro país», «un recinto extraordinario y lleno de historia».

El conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, en un acto en Padrón, aseguró ayer que la familia no les ha comunicado la venta, pero confirmó que solo tendría la obligación de hacerlo si hubiese un hipotético comprador. Sin embargo, reiteró que la Xunta no ejercerá el derecho de tanteo, atendiendo a «un mandato parlamentario que reflicte a vontade democrática dos galegos, que di que Galicia quere que ese ben pase a ser propiedade pública sen ter que desembolsar ningún recurso económico».

Lograr la nulidad

El conselleiro apuntó, tras advertir a los interesados en este bien de interés cultural que la propiedad tiene muchas limitaciones para su uso, que desde la Xunta van a «pelexar dende un punto de vista xurídico e legal para que este ben pase a ser público». Estima que no hay que ponerse nervioso con la venta, sino tener clara una hoja de ruta que, especifica, pasa por «non comprar nin transferir por parte dunha Administración nin un só euro aos propietarios actuais». Y llama a no caer en la «trampa e hipotéticas estratexias que poidan estar orientadas a que Galicia desembolse recursos públicos por este ben». También desde la Diputación, que lidera la Xunta pro Devolución do Pazo de Meirás, exigen «tolerancia cero» con la familia Franco y el inicio de un expediente sancionador, al entender que incumple la Lei de Patrimonio Cultural de Galicia.

Por su parte, Sadamaioría, que ostenta la alcaldía en Sada, considera urgente lograr judicialmente la nulidad del título de propiedad de los Franco, así como la anotación del pazo en el registro de la propiedad para impedir «facer caixa» a la familia Franco.

El Concello de Sada «xamais» autorizará un cambio de uso para el pazo de Meirás, «a non ser que sexa para equipamento público ou sistema xeral público». Desde el gobierno local aclararon ayer que el uso del edificio es, y seguirá siendo, residencial «ata que se poña fin á vergoña da súa detentación polos Franco, e se poida incorporar ao patrimonio público». El grupo de gobierno se desmarca por completo de las declaraciones efectuadas por el gerente de la inmobiliaria que tiene a la venta el pazo de Meirás e insiste al respecto en que «non hai nin aberá negociacións ao respecto. Xamais».

De hecho, la familia Franco ha puesto a la venta el pazo de Meirás por 8 millones de euros a través de la inmobiliaria de lujo santanderina Mikeli. El hijo de Carmen Franco Polo, Francis Franco, ya había anunciado hace unos días que la familia tenía la intención de vender la propiedad en una declaraciones recogidas por el diario ABC. «El pazo de Meirás no está a la venta todavía, pero lo estará», había asegurado el nieto de Franco hace unos días.

La muerte de la única hija del dictador, Carmen Franco, el pasado 29 de diciembre terminó por romper los últimos lazos sentimentales de la familia con la propiedad ubicada en Sada, y podría haber acelerado la decisión de los hijos de desprenderse de la polémica propiedad.

En un vídeo promocional a modo de NO-DO, la inmobiliaria de lujo presenta al inmueble como el lugar de veraneo de Franco, lleno de escudos nobiliarios y que guarda armonía con la naturaleza del lugar. Como si de un documental se tratase, el vídeo hace un recorrido por las estancias relatando cómo era el día a día del dictador y su familia. La expectación por la venta fue tanta, que la web de la inmobiliaria se colapsó debido a las visitas.

Tras las declaraciones Francis Franco manifestando la intención de poner a la venta el pazo de Meirás, el ayuntamiento de Sada había solicitado una convocatoria extraordinaria de una comisión de expertos impulsada por la Xunta y que debería esclarecer la titularidad de la propiedad con la intención de incorporarla al patrimonio público.

En el 2008, el pazo de Meirás fue declarado por la Xunta Ben de Interese Cultural (BIC), lo que acarreaba la obligación de abrirlo al público al menos cuatro días al mes, pero la familia incumplió el régimen de visitas y el gobierno autonómico impuso a la Fundación Franco, encargada de gestionar el inmueble, una multa de 4.500 euros.

Las reacciones no han tardado en llegar. La vicepresidenta de la Diputación provincial, Goretti Sanmartín, ha exigido «tolerancia cero» con la familia Franco y ha instado a la Xunta de Galicia a que «faga cumprir a Lei de Patrimonio cultural de Galicia e inicie de maneira inmediata o expediente sancionador contra a familia Franco por poñer á venda un BIC sen cumprir a obriga de comunicación ao organismo que os tutela que é a Consellería de Cultura».

Por su parte, el Concello de Sada reclama la presentación inmediata por vía judicial civil (acción de nulidad) contra el título de propiedad que tienen los Franco, así como la correspondiente anotación preventiva en el registro de la propiedad.

El conselleiro de cultura, Román Rodríguez, aseguró durante un acto en Padrón, que «a familia ten a obriga cando teña un hipotético comprador de comunicalo a Administración autonómica, a Xunta, e esta ten a posibilidade de exercer o dereito de retracto ou de tanteo, pero xa temos dito que non o vai a utilizar, hai un mandato parlamentario que reflexa a vontade democrática dos galegos, que di que Galicia quere que ese ben pase a ser propiedade pública sen ter que desembolsar ningún recurso económico».

A pesar del gesto de poner el pazo de Meirás a la venta, el conselleiro quiso restar importancia al asunto y aseveró que «só deberiamos estar preocupados cando haxa un hipotético comprador», además de puntualizar que en caso de encontrarlo, éste «ten que saber que este ben ten moitas limitacións para o seu uso».

«Os hipotéticos interesados creo que son coñecedores das dificultades de comprar un ben público», apuntó el conselleiro y consideró que no hay que ponerse nervioso con este tipo de anuncios de venta, sino tener clara una hora de ruta que, especificó, pasa por «non comprar nin transferir por parte dunha Administración nin un só euro aos propietarios actuais deste ben e estamos traballando dende o ámbito xurídico e estamos traballando con moita seriedade porque todas decisións neste ámbito teñen que ter unha seguridade xurídica moi forte para que non xeren efectos perversos».