¿Podrá San Roque acabar con la velutina?

Suso Varela Pérez
suso varela LUGO / LA VOZ

GALICIA

Carlos Castro

La alcaldesa de Lugo tira de ironía y pide en la ofrenda anual al santo ayuda para erradicar la avispa asiática

17 ago 2018 . Actualizado a las 21:45 h.

Hace 250 años Galicia vivía una de las hambrunas más serias de su historia, que desembocó en una época de peste y muertes, además de ser el inicio, para los historiadores, del exilio de miles de gallegos, que escaparon de las aldeas arrasadas por las lluvias torrenciales del verano de 1768, que dejaron los campos sin trigo ni centeno. En aquellos momentos de desesperación, los vecinos de Lugo acudieron a la imagen de San Roque a pedirle protección. Así, cada 16 de agosto, la ciudad renueva sus votos ante el santo, en una tradición que promueve el Ayuntamiento.

Ayer al mediodía, miembros de la corporación de Lugo (ediles del PP, PSOE y Ciudadanos), bajo la presidencia de la alcaldesa, Lara Méndez, participaron en los actos de San Roque, cumpliendo el voto de la capital con el santo. Antes de entrar en la capilla, la regidora socialista, a preguntas de los medios de comunicación sobre cuál sería su petición en este 2018, tiró de ironía: «O que cómpre é pedir que nos axude a combater a praga da velutina, dado que como a Xunta de Galicia di non ter competencias na materia e a única solución que nos dá é convivir con ela, o que pedimos é que San Roque nos bote unha man aos lucenses e a todos os galegos para que inspire ao goberno galego a ver cal é a senda a seguir para eliminar este problema».

Antes, los incendios

Aunque la corporación lucense renueva su ofrenda anual con San Roque, ningún concejal toma la palabra en la homilía, quedando la invocación religiosa en manos del sacerdote. Ayer, dentro de la capilla, la velutina no apareció por ningún lado ni nadie la mentó. Solo se escucharon las palabras que recogen los evangelios. Sí es habitual que, antes o después de la ofrenda, el presidente de la corporación pida al santo algún tipo de ayuda a modo de reflexión en voz alta. Así, por ejemplo, el anterior alcalde de Lugo, José López Orozco, en el 2006, solicitaba a San Roque que acabase «coa praga dos incendios» y finalizaba su discurso con un reconocible eslogan: «Nunca máis lumes».

Con el paso de los años, parece evidente que San Roque poco pudo hacer con la invocación del alcalde Orozco y los incendios continuaron asolando Galicia. ¿Pasará lo mismo con la velutina dentro de una década?

La alcaldesa Lara Méndez recordó los 250 años de historia y apuntó que la ofrenda era un acto relevante «porque é sinónimo de tradición e cultura» y quizás, por ello, por si acaso funciona, pidió al santo ayuda para acabar con el insecto que trae de cabeza este verano a los gallegos. Pero, a la vez, la socialista aprovechó para tirar de retranca y lanzó la crítica contra la Xunta.