¿En qué notarán los pacientes gallegos los cambios que propone el Sergas?

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO

GALICIA

Los gastos en sanidad y servicios sociales son los que concentran buena parte de los Presupostos del 2023.
Los gastos en sanidad y servicios sociales son los que concentran buena parte de los Presupostos del 2023. ROI FERNÁNDEZ

Si se aplican las medidas del borrador, se descongestionarán consultas de los centros de salud, y algunas prestaciones serán atendidas por otras categorías profesionales

13 oct 2019 . Actualizado a las 16:38 h.

Falta concreción tanto en las medidas como en el presupuesto que debe acompañarlas. Esa es una de las primeras reflexiones que hacen los profesionales sanitarios tras el análisis del borrador del nuevo modelo de atención primaria, al que aún pueden presentarse alegaciones hasta el día 28. Pero, si las 175 acciones que recoge el documento se ponen en marcha, el paciente, el eje del sistema de salud, notará los cambios ya en los primeros seis meses.

Algunos trámites los hará otro personal

A corto plazo, seis meses, se aprobará un protocolo para que enfermeros y farmacéuticos puedan solicitar analíticas de pacientes crónicos. La enfermería también podrá validar los tratamientos anticoagulantes orales. A medio plazo, entre seis meses y un año, habrá otras prestaciones que ya no tendrán que pasar obligatoriamente por el médico, como la petición de transporte sanitario, ya que si un facultativo certifica que es necesario durante un tiempo los trámites puntuales podrá hacerlos el administrativo. Ya a largo plazo, es decir, en más de un año, burocracia que ahora mismo debe cumplimentar un médico -dependencia o informes de material ortoprotésico- lo hará otro personal siempre que la legislación lo permita. 

¿Consultas menos saturadas?

Se articulan algunas medidas para que los médicos no se encuentren con 50 pacientes diarios, y que los usuarios, por lo tanto, tengan una mejor atención. Por ejemplo, no se bloquearán agendas completas aunque falte el médico porque cuando se bloquea muchos usuarios acuden a su centro de salud sin cita programada, lo que satura el trabajo diario. Si falta un médico y no hay sustituto, el jefe de servicio decidirá si sus usuarios los atienden los compañeros -siempre que el cupo del ausente no supere las 1.300 tarjetas-, o se prolonga la jornada. Esto se hará en seis meses. 

También se analizarán los cupos de los médicos para ver si hay que redistribuir las tarjetas sanitarias en función del tipo de paciente. Ya a largo plazo se propone ofrecer a médicos mayores de 55 años que hagan trabajo remunerado fuera de su horario ordinario, para descargar la sobrecarga asistencial. 

Pruebas

Si hoy un usuario acude a su médico de cabecera y este considera que debe pedir una prueba complementaria, probablemente en Santiago no podrá hacerlo, pero en Ourense sí. En teoría esto se acabará en seis meses. Se unificará en todas las áreas el catálogo para pedir pruebas complementarias desde primaria. 

Urgencias

Ahora mismo si un paciente llega a su centro de salud sin cita porque tiene una urgencia, el personal administrativo le busca un hueco en la agenda del médico. En el propio semestre se habilitará otro sistema. Primero el administrativo verá si es por un tema sanitario o burocrático, y si es este último caso no lo derivará. Si es una consulta de salud, la enfermería atenderá al paciente si puede solventarlo, y solo si no es así lo enviará al médico. Si el enfermo acude por un tema relacionado con su tratamiento crónico y hay farmacéutico en el centro -no muchos lo tienen- será este quien haga la consulta.