El Gobierno reabre el debate sobre la financiación de la red de carreteras

pablo gonzález / carlos punzón REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El Gobierno socialista de Sócrates implantó los peajes automáticos en las autovías gratuitas en el 2010.
El Gobierno socialista de Sócrates implantó los peajes automáticos en las autovías gratuitas en el 2010. GUSTAVO RIVAS

El pago por el uso de las autovías será una de las opciones a discutir en una subcomisión

14 feb 2020 . Actualizado a las 16:59 h.

El rescate de las autopistas radiales y la posterior rebaja de sus peajes; la liberación de vías de alta capacidad una vez finalizada la concesión; el desequilibrio tarifario en distintas autopistas de peaje como la AP-9. El escenario en la red de carreteras ha cambiado mucho en los últimos años y el déficit que arrastra el mantenimiento de las carreteras -con el consiguiente efecto sobre la seguridad- aún no ha podido reconducirse para llegar a los niveles de conservación que había antes de la crisis. En este contexto enmarca el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana el debate que pretende abrir en el Congreso sobre la financiación de la red viaria de alta capacidad, según ha confirmado en una respuesta parlamentaria.

La pregunta, realizada por dos diputados de Vox, reclamaba información sobre las previsiones «acerca del cobro de una tasa por el uso de las autovías que no estaban sujetas a gravamen». La respuesta gubernamental no entra directamente en el asunto planteado, pero sí admite que es necesaria una revisión del actual modelo. «El Gobierno ha manifestado en reiteradas ocasiones la necesidad de que se lleve a cabo una reflexión profunda y consensuada del sistema de financiación de las infraestructuras», explican en su contestación. «La intención del Gobierno es la revisión del modelo de peajes de la red viaria de alta capacidad, encaminado a garantizar la sostenibilidad y el uso eficiente», añaden.

En su respuesta, el Ejecutivo de Pedro Sánchez menciona el intento, en la legislatura de la moción de censura, de crear una subcomisión para el estudio de un nuevo modelo de financiación dentro de la comisión de Fomento. No pudo constituirse, pero, en la exposición de motivos para crear la subcomisión, el PSOE ya avanzaba que los 850 millones consignados en los presupuestos en los últimos años son «insuficientes» para mantener en buen estado la red, y que el déficit de conservación generado entre el 2012 y el 2017 precisa una inversión pública superior a los 2.000 millones. En su propuesta para una Subcomisión de Estudio de la Sostenibilidad de la Red de Carreteras del Estado, planteaban analizar los distintos modelos financiación en otros países y establecer «alternativas para la sostenibilidad financiera de la conservación y explotación de la red de carreteras del Estado».

Ni en esta petición de los socialistas ni en la respuesta parlamentaria del Gobierno se menciona de forma directa la posibilidad de establecer una tasa por uso en las autovías gratuitas. Un portavoz de Transportes aclaró que desde el ministerio «no se defiende ninguna opción concreta, sino la necesidad de abrir el debate sobre la financiación». Pero sin duda será uno de los elementos que se tocará en una subcomisión que los socialistas quieren retomar en esta legislatura. De hecho, en el pacto de gobierno con Podemos se especifica que se impulsará una revisión del modelo de peajes de la red viaria de alta capacidad «encaminada a garantizar la sostenibilidad y el uso eficiente».

Este nuevo intento de lanzar este debate se une a otros anteriores, en los que la posición del ministro José Luis Ábalos se situaba entre lanzar el globo sonda del pago por el uso y la necesidad de mutualizar en el Congreso una medida que sería a todas luces impopular, aunque llevara aparejada la posibilidad de equilibrar tarifas de peaje desbocadas como las de la AP-9. El debate, en cualquier caso, resurge después de que Ábalos recordara en pleno verano que las infraestructuras viarias, salvo las que operan en concesión, «son las únicas infraestructuras en materia de transporte que no están sometidas a un pago por uso».

Un informe del Foro Económico de Galicia ve insostenible la situación actual

Desde el sector de las constructoras y empresas de logística del transporte se promociona el pago por el uso de las autovías desde hace mucho tiempo. Muchas de estas firmas aspiran a gestionar este eventual sistema de peaje blando ante el final de las concesiones y el fin de ciclo en la construcción de grandes infraestructuras. Un informe reciente del Foro Económico de Galicia, realizado por la profesora universitaria Mar González Savignat, concluye que el actual modelo de financiación es insostenible y recomienda acometer medidas urgentes, pues recuerdan que el Banco Mundial aconseja destinar a mantenimiento el 2 % del valor patrimonial de la red, lo que en España significaría una inversión anual de 3.700 millones, cinco veces más que lo que se ha estado invirtiendo de media en los últimos años.

En el informe Infraestructuras viarias: inversión y tarificación se especifica que en España solo el 18 % de la red está tarificada con peaje, «el porcentaje más bajo de la UE», donde «está más generalizado el pago por el uso y la euroviñeta como vía para financiar las infraestructuras». «Si a esto añadimos que en los próximos años casi en 1.000 kilómetros de autopistas vencen los contratos de las concesiones, la sostenibilidad financiera se complica más». España sería el país con más kilómetros de red y menos ingresos, por lo que plantean generalizar el pago por uso y relacionarlo con la distancia recorrida y con el tipo de vehículo, pues los camiones generan más desgaste. 

 

Portugal vota hoy si elimina los peajes de su autovía entre Galicia y Oporto

Diez años están a punto de transcurrir desde que Portugal sembró de peajes sus autovías para recaudar los fondos necesarios para mantener sus viales. El sistema de pórticos sin personal de cobro y con cámaras que hacen el cargo de forma automática supuso un grave perjuicio a la movilidad entre Galicia y el norte de Portugal por la complejidad en la forma de pago, pero además menguó de manera significativa las relaciones comerciales establecidas entre ambas áreas. Con esas consideraciones sobre la mesa, el empresariado del Alto Minho llevó ayer al Pleno de la Asamblea de la República de Portugal 7.426 firmas que respaldan la petición de eliminación de los peajes en el área de Viana do Castelo y, fundamentalmente, en el acceso a sus polígonos industriales, donde la presencia de firmas gallegas es palpable. La petición fue respaldada con otra a mayores de los diputados del Bloco de Esquerda, en la que reclaman que sean eliminados todos los peajes de la autovía A-28, la que conecta Galicia con Oporto.

Ambas propuestas serán votadas hoy en la Cámara legislativa lusa, después de que todos los grupos marcaran sus posiciones en el pleno de ayer. Ante ellos la Confederación Empresarial do Alto Minho y el Bloco advirtieron que el 65 % de las mercancías exportadas por carretera salen a través de Galicia y también hacen el mismo recorrido el 51 % de las importaciones de Portugal, por lo que los peajes de la A-28 no han venido más que a encarecer o dificultar esa relación comercial, o a desviarla a otros puntos del país en perjuicio del norte.

El Partido Socialista, formación del Gobierno, anticipó en el debate su comprensión hacia dichas peticiones de eliminación de los peajes, pero aseguró que dicha medida tendría un alto impacto financiero por compensación a la concesionaria. Los socialistas, eso sí, se abrieron a implantar descuentos a los usuarios frecuentes y a extender las rebajas en los peajes que ya se aplicaron en los últimos años en los viales del interior del país.

Los diputados del comunista PCP fueron más allá que el Bloco, antiguos socios de alianza del PS, al exigir la gratuidad en todas las autovías del país, mientras el único diputado de Chega!, André Ventura, subrayó el perjuicio que los peajes le han causado a la captación de viajeros al aeropuerto Sá Carneiro. El conservador PSD apoyó, por su parte, la eliminación solo del peaje de Viana, que recauda 350.000 euros al mes en peajes.