Los críticos del alcalde de Ourense se mueven para cerrarle el grifo económico

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

GALICIA

En plena tormenta política y con el apoyo de solo un concejal, Jácome presentó a los dos primeros informáticos contratados para el Centro de Inteligencia Artificial
En plena tormenta política y con el apoyo de solo un concejal, Jácome presentó a los dos primeros informáticos contratados para el Centro de Inteligencia Artificial cedida

Caride da por recuperada la portavocía de Democracia Ourensana

19 sep 2020 . Actualizado a las 14:37 h.

El pulso entre Gonzalo Jácome y los cuatro ediles críticos de Democracia Ourensana (DO) se mantiene. Desde que a finales de agosto presentaran un escrito en Fiscalía para denunciar presuntas irregularidades por parte del alcalde en la gestión de los fondos que el partido recibe, el funcionamiento económico de DO ha estado en el centro del debate. Y sigue estándolo. Los cuatro ediles díscolos quieren cerrar el grifo a Jácome. Para ello, pidieron al secretario del Concello de Ourense, a través de un escrito presentado esta misma semana, que suspendiera cautelarmente las asignaciones de dinero público que recibe el partido al no tener constancia de que se estén destinando «a fines municipales relacionados con el funcionamiento del grupo». Recuerdan, además, que esas cuentas son gestionadas de manera «exclusiva y excluyente» por Jácome.

En ese mismo escrito, los ediles críticos pedían al alto funcionario que restituyera a Miguel Caride como portavoz municipal de Democracia Ourensana. El líder de los críticos ocupaba ese cargo hasta que fue relevado por Jácome, gracias al apoyo de otros tres ediles que firmaron la petición de relevo en favor de Armando Ojea. Ahora, la balanza del poder en DO vuelve a ser favorable a los críticos, que son cuatro contra dos. La petición firmada por María Teresa Garrido, Manuel Álvarez, María del Mar Dibuja y el propio Caride es considerada por los críticos ya como válida para recuperar el control de la portavocía del partido. Pese a ello, ayer presentaron otro escrito en el que piden al secretario que certifique quién es el portavoz de DO.

Las dos principales vías de ingreso de Democracia Ourensana están ahora mismo en el aire. Por un lado están las donaciones que realizan los concejales y los asesores. Estas se hacen, según fuentes de los críticos de DO, siempre a final de mes una vez que reciben la nómina del Concello. «Entendemos que en esta situación muchos se harán los remolones para entregar el dinero», indican las mismas fuentes.

La otra fuente de financiación del partido de Jácome pasa por las aportaciones que recibe por formar parte de Concello y Diputación. En la institución provincial, el destino del dinero depende directamente de Caride. En el Concello, a la espera de que el secretario acepte o no la suspensión cautelar de los ingresos, el objetivo de los críticos es que la decisión de a qué se destina ese dinero se tome de manera democrática. En el caso del Concello, la aportación es de 700 euros por grupo y otros 700 por cada concejal al mes.

El futuro concejal medita si dar su apoyo al alcalde de Ourense: «Tengo que pensar»

El alcalde de Ourense, Gonzalo Jácome, convocaba este viernes el pleno municipal en el que tomará posesión el nuevo concejal de Democracia Ourensana el próximo miércoles, 23 de septiembre. Se trata Telmo Ucha, que hasta que estalló la crisis del gobierno de Ourense trabajaba como asesor del alcalde. Siempre se había dado por descontado su apoyo a Jácome, toda vez que durante el anterior mandato se mostró como uno de los ediles más fieles al líder del partido. Sin embargo, el futuro concejal todavía no ha tomado una decisión definitiva. Este viernes recibía las credenciales para formar parte de la corporación. Desde que tome posesión de su acta, Telmo Ucha tiene cinco días para decidir si pasa a formar parte del grupo municipal de DO o si por el contrario se integra en el grupo de concejales no adscritos. «Hoy (por ayer) llegaba mi credencial y por eso suspendí los días que había cogido de descanso. Tengo que pensar en lo que se nos viene encima», aseguró.

La decisión de Ucha no es baladí. Si decide dar la espalda a Jácome dejará al gobierno de Ourense sin capacidad para ni tan siquiera convocar juntas de gobierno y sacar adelante acuerdos básicos para el funcionamiento de la ciudad. Además, en caso de una hipotética moción de censura, su voto podría decantar la balanza en un acuerdo entre PSOE, Ciudadanos y BNG. Jácome, por su parte, no quiso hacer valoraciones.