«La beca me dio la oportunidad de estudiar y también de conocer Galicia»

m. s. REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Inés Llano Rial en el exterior de la empresa en la que realiza las prácticas, en Vigo
Inés Llano Rial en el exterior de la empresa en la que realiza las prácticas, en Vigo M.MORALEJO

Inés Llano Rial, uruguaya de origen gallego, estudia un máster en Vigo gracias a las Bolsas Excelencia Mocidade Exterior. «Me gustaría quedarme», dice

15 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Su madre nació en Parada (Nigrán) y acabó haciendo su vida al otro lado del Atlántico, en Uruguay. Allí se fue también su abuela. Ninguna de las dos hizo el camino de vuelta para regresar definitivamente a Galicia, pero ninguna de las dos se desprendió de sus raíces. Esas raíces prendieron también en Inés, que escuchó cientos de veces a su abuela contar cómo era la vida en aquella Parada de la que salió.

Hoy, Inés Llano Rial vive en Parada. «A unos metros de donde nació mi mamá», explica. Llegó a Galicia en el mes de septiembre para realizar un máster en la Universidade de Vigo gracias a una beca de la Secretaría Xeral da Emigración. Y se instaló en Nigrán, con sus primas, que habían emprendido antes que ella el trayecto de regreso desde Uruguay. «Creo que soy la única de los que vinimos con la beca que no vive en Vigo», dice.

Era la primera vez que Inés venía a Galicia. «Mis hermanos habían estado en campamentos, pero a mí no me tocó venir en viajes anteriores». Así que la beca de la Xunta ha sido para ella «una oportunidad para estudiar, pero también para conocer Galicia, para ver otro mundo y para ver cómo se trabaja aquí».

Inés Llano tiene 33 años. En Uruguay se licenció en Administración de Empresas y Márketing y estuvo trabajando hasta que en enero del 2020, cuando el virus que trajo el covid-19 estaba comenzando a expandirse, perdió su empleo. Tanto ella como su familia estuvieron siempre muy conectadas a las instituciones gallegas con presencia en Uruguay, y así fue como conoció las Bolsas de Excelencia Mocidade Exterior (BEME) y decidió optar a ellas. «Me ayudaron mucho en la delegación gallega a la hora de informarme y de presentar la documentación». Y finalmente fue seleccionada.

Llegó a Vigo en septiembre y, aunque al principio le costó un poco adaptarse a las normas que imponía la pandemia, enseguida se amoldó a su nueva vida. Matriculada en el máster de Administración Integral de Empresas y Responsabilidad Social y Empresarial, ahora está ya en la fase de prácticas en empresas. Su idea es finalizar en junio con la presentación del proyecto y, a partir de ahí, «buscar oportunidades laborales». Tratar de encontrar trabajo y también disfrutar del verano, porque llegó desde el invierno uruguayo y se metió en el otoño y el invierno gallegos, así que ya tiene ganas de un poquito de calor.

«Me gustó mucho Galicia y me gustaría quedarme. Si encuentro algo me quedaré aquí», asegura. Además de reencontrarse con las raíces de su madre y de su abuela, en Galicia se sorprendió con «la amabilidad de la gente». Valora también la tranquilidad y la seguridad: «Puedes conocer sitios maravillosos sin ningún temor». Si puede, afirma, a Uruguay volverá solo de visita. Al fin y al cabo, su madre y su abuela están a miles de kilómetros, pero muy cerca: «Siento la presencia de ellas todo el tiempo».

La nueva convocatoria bate el récord de solicitudes, 470 para 200 plazas

Inés Llano Rial está a punto de finalizar la formación que la trajo a Galicia y la secretaría Xeral da Emigración ha impulsado ya un nuevo proceso para el próximo curso. Cerrado el plazo de solicitud, se ha batido el récord de aspirantes, con 470 para las 200 plazas convocadas para realizar másteres en las tres universidades gallegas. Optan a las becas gallegos o descendientes de gallegos de treinta países, entre los que destacan Argentina entre los americanos, y Reino Unido, entre los europeos, pero que incluyen otros como Cabo Verde, Dinamarca, Guatemala o Perú, desde los que nunca se habían solicitado estas becas.

La Xunta destina 1,72 millones de euros a esta iniciativa que otorga a los estudiantes becas de 7.000 o 7.650 euros en función de si proceden o no de Europa para cursos de sesenta créditos. En caso de estudiantes que se matriculen en un curso de mayor duración, de noventa créditos, la cantidad puede alcanzar los 11.475 euros.

Los beneficiarios de estas ayudas deben ser gallegos o descendientes de gallegos que acrediten un mínimo de dos años de residencia en el exterior y que estén admitidos en la preinscripción de alguno de los másteres que imparten las universidades gallegas.