Un tanto de estrategia de Jacobo González sirvió para superar al Las Palmas Atlético en un duelo con polémica arbitral
23 feb 2020 . Actualizado a las 14:52 h.El Celta B se reengancha a la vida. En una situación difícil después de perder el fin de semana pasado en el descuento un partido que tenía ganado, fue capaz de sacar adelante una contienda vital ante el Las Palmas Atlético con un gol de Jacobo González y superando una polémica arbitral que pudo ser determinante, ya que el castellano leonés Cid Camacho le anuló un gol legal a Sergio Bermejo que hubiese supuesto el segundo tanto vigués y mayor margen de tranquilidad para los célticos, que dominaban el partido por la mínima.
El Celta B destrabó un duelo táctico en el momento idóneo. En la última jugada antes de marcharse al descanso en un córner sacado en corto para Jacobo González, que golpeó por abajo y al palo largo para superar un bosque de piernas y alojar el esférico en la red.
Fue la mejor manera de encarrilar un partido plomizo, con mucha intensidad en la presión y sin apenas ocasiones para ninguno de los dos equipos, aunque el Celta B, corriendo al espacio gracias a la velocidad de Yeboah, llegó en dos ocasiones a los dominios del rival, pero sin acierto en el último pase.
El Las Palmas quiso cambiar el rumbo del partido con dos cambios en el descanso, pero salvo un par de avisos nada más salir, lo único que hizo fue ceder terreno a un Celta B que comenzó a crecer y a crear ocasiones a la contra. Una muy clara llevó la firma de Yeboah, que fue desequilibrado por un defensa rival y pese a ello siguió con el balón en sus pies y superó al portero con un tiro cruzado que un defensa desbarató cuando el balón ya se colaba. A continuación llegó la única respuesta insular en un córner mal defendido que permitió a Juan Rodríguez cabecear en el área pequeña y con Rosic batido apareció Markel para sacar el balón bajo palos.
El partido debió quedar sentenciado poco después de la hora de juego. En una excelente contra en donde Carreira profundizó por la banda derecha para entregar el balón a Sergio Bermejo, que marcó desde la frontal con un tiro ajustado, pero cuando los locales ya celebraban el gol, el colegiado lo anuló aduciendo que había fuera de juego posicional de Jacobo, que no intervino para nada en la jugada. La imagen televisiva se encargó de indicar que el atacante céltico estaba en posición correcta y que el gol era del todo legal.
La decisión arbitral llevó el partido a una fase de desconcierto con el colegiado coleccionando tarjetas en la nómina del Celta B, pero aun así el filial siguió teniendo el control del partido y las oportunidades. Manu Justo se empachó de balón con dos compañeros esperando para sentenciar. También la tuvo Yeboah en otra llegada franca pero el equipo local tuvo que esperar hasta el último segundo para celebrar un triunfo que le acerca a dos puntos del play-out, la primera tabla de la salvación en otro año cargado de dificultades.