La oposición reclama diálogo para acabar con la guerra de Balaídos

x.r.c. VIGO

GRADA DE RÍO

XOAN CARLOS GIL

Marea de Vigo y BNG ven en la carta de Mouriño un primer paso y piden altura de miras a Caballero mientras el PP tacha de vergüenza el gasto económico

27 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Carlos Mouriño, el presidente del Celta, envió una carta a la corporación municipal de Vigo solicitando que parasen el «despropósito» de la reforma de Balaídos. Una misiva que no ha caído en saco roto, al menos para el BNG y Marea de Vigo, dos grupos de la oposición que ven necesaria una reunión entre el club y el concello como punto de partida. El Partido Popular tacha de «vergüenza invertir tanto dinero en un estadio que no contenta ni a club ni a afición».

En enero del año 2015 el Celta y el Concello firmaron un convenio para la reforma del estadio de Balaídos, documento en el que se recogía la existencia de una comisión de seguimiento en donde estaría representado el club de fútbol, quien denunció en agosto del 2019 que no era convocado a ninguna reunión y que la obra se hacía sin ningún tipo de consulta.

Esta situación perdura en el tiempo un año y medio después, tiempo en el que Mouriño y Caballero se han enviado recados epistolares y a través de los medios de comunicación, pero nunca en un cara a cara que pudiera desbloquear la situación.

Algo que desde el BNG se cree imprescindible para poder avanzar. «É o momento de poñer cordura institucional e sentarse a falar», comenta Xabier Pérez Igrexas, el concejal nacionalista en el Concello de Vigo, que considera que le corresponde a Abel Caballero dar el primer paso: «Esixe que haxa alguén que teña a suficiente altura de miras e o suficiente exercicio de responsabilidade como para a marxe das polémicas ou dos resquemores ser capaces de convocar o outro, e iso correspóndenlle o alcalde da cidade». Recuerda el Bloque que en su día ya apostó por una comisión en donde además del club y el Concello también estuviese la Diputación, la Federación de Peñas, el movimiento vecinal de la zona y los atletas, porque la reforma del estadio de atletismo también debería ir en el mismo saco.

Marea de Vigo también urge diálogo para no malgastar los 35 millones a los que se ha disparado la reforma de Balaídos. «Parece que non son capaces de poñerse dacordo, pero entendemos a queixa do Celta e entendemos tamén que se debe paralizar a licitación de Balaídos ata que se resolvan estas cuestións. Os dous teñen que sentarse e clarificar primeiro qué proxecto queren e o qué queren facer no estadio», comenta Rubén Pérez, que considera la carta enviada la corporación como el primer movimiento por parte del Celta y anuncia que su grupo político solicitará en pleno «emplazar ó concello a reactivar esa comisión de seguimento que aparece no convenio asignado no ano 2015».

No tiene ninguna duda el concejal de Marea de Vigo que «o club ten que ser escoitado», recordando que en su día se había comprometido a pagar 800.000 euros de canon anual por utilizar las instalaciones de carácter municipal. «Mouriño vén dicir na carta que nin sequera se lle consultou o tema das distancias mínimas nos asentos que iso é unha ridiculez tal e como estaba en orixe».

La obra, según recordó el Partido Popular, tenía que estar finalizada en el año 2017 y tres después todavía quedan los dos fondos. Consultado a través del gabinete de prensa el grupo de gobierno optó por el silencio.

«Unha obra mastodóntica a velocidade de tartaruga sen contar con ninguén»

El Bloque considera que el gobierno municipal del PSOE en Vigo está actuando con la reforma de un modo unilateral, algo que no se puede tolerar estando una institución como el Celta de por medio. «Non ten sentido está a levar a cabo unha obra mastodóntica a velocidade de tartaruga como se está a desenvolver o proceso de reforma do estadio sen contar con ninguén, porque non é so que non se conte co club, que ten dereito a ter a súa opinión e o seu parecer debe terse en conta», indica Xabier Pérez, que ve de sentido común que el Celta quiera saber el aforo final recinto cuando se corrija «o desastre da zona de grada de Río onde se deixaron unhas distancias minúsculas entre asentos». Los nacionalistas consideran que «a sucesión de problemas, prazos e calendarios non atisban nada bo».

La licitación de Marcador

En Marea de Vigo vincula la reciente licitación de Marcador con un tema de maquillaje presupuestario en materia de inversiones. «Logo de estar parada a licitación de Marcador, sen ningún motivo, saca a licitación para maquillar os números da execución orzamentaria. Dos 28 millóns de licitacións, 23 son de grada», explica Rubén Pérez, que repasa el pacto de Los Escudos y analiza la actitud del grupo de gobierno municipal «que decidiu seguir licitando por cachos a renovación do estadio sen contar con club, cando figura no convenio do ano 2015 que o club debe ser escoitado e participar nas reunións da comisión de seguimento».

El PP lo resume todo a que «es una vergüenza invertir tanto dinero, una cantidad millonaria en un estadio que no tiene contento ni al club ni a la afición y que lleva años y años de obra de una reforma que tenía que estar finalizar en el 2017», según Alfonso Marnotes, su portavoz.