Lágrimas en el paraíso de los famosos

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

El fuego reduce a cenizas cientos de casas en los barrios más pudientes de California. Los muertos ascienden ya a 44

13 nov 2018 . Actualizado a las 16:50 h.

Nadie se salva del imparable avance de las llamas en la periferia de Los Ángeles, que deja ya 44 muertos. Con el pánico aún en el cuerpo por el tiroteo que un exmarine protagonizó en un bar de copas de Thousand Oaks la semana pasada, sus vecinos han tenido que afrontar un desalojo masivo ante la llegada de hasta tres incendios forestales que devastan uno de los lugares más paradisíacos de la costa californiana.

De la peste incendiaria no se libra nadie. De hecho, el alto número de personajes del famoseo afectados ha disparado el interés por un siniestro que se repite año tras año. Caitlyn Jenner, una de las cabezas del clan de los Kardashian, Miley Cyrus, en plena crisis amorosa, el roquero Neil Young, que ayer cumplía años, Lady Gaga, Guillermo del Toro, Orlando Bloom, Bryan Signer (director de Bohemian Rapsody), Julia Roberts, Gerald Butler... la lista de damnificados se hace eterna y sus redes sociales se convierten en la mejor descripción del estado de descontrol y de la incapacidad de los servicios de emergencias para controlar la situación, que han recibido ya hasta las críticas del presidente, Donald Trump.

En la retahíla de afectados hay lugar también para una cuota de galleguidad, como es el caso del actor Martin Sheen, que tuvo que pasar la noche en el interior de su vehículo al pie de la playa de Malibú tras ser desalojado, o el matrimonio formado por el cineasta coruñés Pedro Castro y la cantante asturiana Raquel del Rosario, que se instaló a orillas del Pacífico hace cuatro años y ayer colgaba la foto de su casa arrasada por las llamas, aunque a salvo de cualquier peligro.

Menos suerte han tenido las 44 víctimas mortales ya contabilizadas por las autoridades. Es el que más muertos ha causado en el estado, superando los 29 del de Griffith Park de 1933.

El sheriff del condado de Butte, Kory Honea, informó de que se han denunciado un total de 228 desapariciones de personas. «Hasta ahora hemos localizado a 107 personas que estaban desaparecidas», explicó Honea antes de añadir que lo más probable es que la mayoría de los desaparecidos se encuentren a salvo tras huir de las llamas.

El conocido como fuego de Woolsey está controlado solo al 20 % y ha destruido ya 37.000 hectáreas y 370 estructuras. Los vientos, con rachas de hasta 100 kilómetros por hora, se mantienen en zonas montañosas, valles y cañones del sur de California, lo que dificulta las labores de extinción y el riesgo para las infraestructuras. En particular el peligro podría venir de la caída de postes del tendido eléctrico y árboles. La falta de cuidados de las áreas boscosas y las condiciones climatológicas son señaladas como las causas del fuego.