Monforte saca brillo a su único mirador sobre el cañón del Sil

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

LEMOS

Una tirolina iba a enlazar el mirador del Duque, en la foto, y del de Matacás, del otro lado del cañón del Sil
Una tirolina iba a enlazar el mirador del Duque, en la foto, y del de Matacás, del otro lado del cañón del Sil CARLOS RUEDA

Una nueva plataforma se levanta en el lugar elegido para la fallida tirolina

10 jul 2019 . Actualizado a las 19:09 h.

Los miradores sobre el cañón del Sil no son patrimonio exclusivo de Sober. Dentro del término municipal de Monforte, se puede disfrutar de una de las vistas más espectaculares del principal icono turístico de la Ribeira Sacra. Por encima del embarcadero del catamarán, en terrenos de la parroquia monfortina de Marcelle, el mirador del Duque se eleva sobre los viñedos de Doade y ofrece una amplia panorámica de las riberas de Sober y Castro Caldelas. Tras una etapa de cierto abandono, el Ayuntamiento se ha decidido a sacarle brillo con la realización de un proyecto de reforma integral.

Más que una reforma, en la práctica el proyecto implicaba la construcción de una nueva estructura. Aunque quedan por cerrar algunos detalles, las obras están prácticamente terminadas y el mirador presenta una imagen muy diferente a la que ofrecía hace solo un par de meses. Construido en 1998, no siempre recibió la atención que cabía esperar de sus aspiraciones como reclamo turístico. La señalización era deficiente y el deterioro de los elementos constructivos hizo necesarios arreglos puntuales en varias ocasiones.

Nueva señalización

El problema de la señalización quedó resuelto recientemente con la inclusión del mirador de Marcelle en un plan de mejora que fue promovido por el Ayuntamiento con la colaboración económica de la Xunta. Las nuevas plataformas, por otro lado, mejoran las condiciones de seguridad y la visibilidad del cañón del Sil desde lo alto de la ladera. «Los puntos de observación ganan altura sobre el terreno escarpado aumentando así la sensación de vacío y su atractivo», detalla la memoria del proyecto.

Justo enfrente, en el municipio de Castro Caldelas, está situado el mirador de Matacás, que también fue objeto recientemente de obras de remodelación. La controvertida tirolina sobre el cañón del Sil iba a enlazarlos, pero fue aparcada para no perjudicar a la candidatura a patrimonio de la humanidad. Las diputaciones de Lugo y Ourense habían asignado fondos para financiarla.

Algunos pinos inoportunos y un panel informativo que todavía deberá ser instalado

Del proyecto del mirador del Duque solo queda pendiente la instalación de un panel informativo con información sobre el paisaje que se puede observar desde allí. Está por definir, por otro lado, si los pinos de mayor tamaño que crecen en sus inmediaciones se mantienen o si se solicita su tala para evitar que condicionen la visibilidad. La remodelación fue contratada por el Ayuntamiento a la empresa Sergonsa Servicios por un presupuesto de 51.000 euros. Las obras se iniciaron el pasado mes de mayo y fueron subvencionadas por el Leader, a través del grupo de desarrollo local de la Ribeira Sacra. Estas fueron algunas de las actuaciones que se llevaron a cabo:

Mayor seguridad. Las anteriores barandas estaban formadas por postes de madera de pino, con un tratamiento para incrementar su resistencia a la humedad. Los pasamanos, del mismo material, se situaban a un metro de altura. La remodelación realizada en el mirador del Duque corrige ese «déficit de seguridad» con nuevas barandas de chapa de acero y huecos entre ellas de no más de diez centímetros.

Diseño más actual. La nueva configuración del mirador consiste en una estructura de acero voladiza instalada sobre la ladera, que se asienta en un cimentación oculta de hormigón armado. El pavimento de las plataformas es de tablas fijadas a un armazón metálico. Al tratarse de una zona incluida en el ámbito del Paisaje Cultural de la Ribeira Sacra, todas las actuaciones fueron supervisadas por la Dirección Xeral de Patrimonio.