En el detallado repaso de lo hecho en las distintas áreas de gestión, el alcalde reseñó que la inversión por habitante es en la actualidad de 174,24 euros, mientras que en el 2006 era de 117,83; el gasto asciende a 926,02 euros y, en el 2006, fue de 875,35 euros. López Orozco analizó el estado de ejecución de las distintas obras, tanto municipales como de otras administraciones, así como las prestaciones sociales, la promoción del empleo, y todos y cada uno de los servicios. Recordó las distinciones internacionales y nacionales (entre ellas el premio Reina Sofía de accesibilidad) conseguidas por el Concello. Destacó la consecución, por primera vez, del plan Urban. La cultura y el turismo fueron dos áreas en las que Orozco se paró con bastante detalle, así como en el desarrollo urbanísticos y las nuevas infraestructuras.
El popular García y el nacionalista Lage rebajaron el optimismo del alcalde con los datos menos favorecedores del funcionamiento de algunas concesiones administrativas, los conflictos con policías y bomberos y el retraso en la ejecución de infraestructuras y dotaciones largamente esperadas. Salió en el debate la situación del ferrocarril en Lugo, en el que los grupos insistieron en los argumentos conocidos. De nuevo, PSOE y BNG cruzaron críticas por la no incorporación del Ayuntamiento al Consorcio de Servizos Sociais.