«No me arrepiento de volver al Breo»

LUGO

Carlos Castro

Asegura que desde su llegada al club Ochefu «fue el único jugador que no estuvo a la altura»

13 jun 2019 . Actualizado a las 18:37 h.

La afición le quiere y así se lo hizo saber en el adiós del Cafés Candelas Breogán a la Liga Endesa. Durante el partido ante el Burgos miles de aficionados pidieron en el Pazo la continuidad como técnico de Tito Díaz (Lugo, 1957), que regresó al club dos décadas después, cuando restaban 11 partidos para el final de Liga, pero los avances que hizo el equipo desde su llegada no fueron suficientes para seguir entre los gigantes del básquet español.

-¿Qué siente uno cuando escucha a toda una afición reclamando su permanencia en el equipo?

-Agradecimiento, lo primero, y satisfacción porque no siempre todo va en función de los resultados y la gente ha sabido valorar todo el gran trabajo que hay detrás a pesar del descenso.

-¿Le gustaría abanderar el proyecto breoganista para regresar a la Liga Endesa?

-Soy profesional y breoganista, y lo mejor a lo que puede aspirar cualquier entrenador es a dirigir al equipo de su vida.

-Tras el partido ante el Burgos declaró que había vivido los dos meses más duros de su carrera. ¿Fue una buena decisión regresar al Breo?

-Sí, siempre. Me siento orgulloso de haber dirigido a este equipo a la ACB y de pelear hasta el último momento por evitar el descenso. No me arrepiento en absoluto de volver, aunque es verdad que me hubiera gustado tener un poco más de tiempo para poder instalar todo mi baloncesto aquí. Llegué un martes y el domingo ya teníamos un partido clave contra el Fuenlabrada, al domingo siguiente otro, a veces dos... Todo fue muy rápido. Lo que tratamos fue de darle ritmo y competitividad al equipo y creo que eso se logró porque de 11 partidos dimos la talla en 10 y en muchos de ellos estuvimos muy cerca de ganar.

-¿Merecieron más en el tramo final de liga?

-Creo que sí. Perdimos partidos muy ajustados, sobre todo ante Fuenlabrada, Valencia y Tenerife, de los que algunos pudieron caer para nuestro lado perfectamente y ahora estaríamos hablando de un desenlace bien distinto.

-Desde fuera daba la impresión de que el desánimo era uno de los mayores problemas del equipo.

-Lo primero que hice cuando llegué fue hablar uno por uno con los jugadores y es verdad que los noté un tanto cansados física y mentalmente. Nuestro primer objetivo, el de Javi Muñoz y el mío, que trabajamos de la mano junto con Pablo Abuín, fue intervenir en ese aspecto y simplificar un poco el juego y darle ritmo, y creo que el equipo dio un paso adelante. Faltó un poco de suerte en determinados momentos y con las lesiones.

-Al margen de todo esto, muchos jugadores no han estado a la altura y el Breo lo acusó.

-Del tiempo que yo he estado aquí lo que más lamento son las lesiones, y creo que el único jugador que no estuvo a la altura fue Ochefu; se lesionó al llegar, pero no tuvo la capacidad de sufrimiento que sí tuvieron otros. El resto lo dio todo, cada uno con sus características y sus limitaciones. A nivel de esfuerzo y compromiso no tengo ninguna queja. Vivimos un hecho puntual con Alec Brow en un partido porque él entendía que su tobillo no le permitía jugar y yo creía que sí, pero al día siguiente ya estaba entrenando. La falta de compromiso no fue un problema y si los jugadores no estuvieran a su nivel no hubiéramos competido como lo hicimos.

-Salva Arco denunció que algunos jugadores no respetaron la camiseta del Breo.

-Seguramente se refería a estos jugadores americanos que estuvieron antes de que yo llegara y a lo mejor también a Ochefu... Nosotros creíamos que con dolor se podía entrenar y Salva Arco es un ejemplo. Las lesiones han sido un gran lastre para el Breogán, si bien es verdad que el tema físico habría que revisarlo.

-¿Es necesaria una profunda reestructuración en la plantilla?

-La habrá porque hay un cambio de categoría. En estas situaciones los jugadores casi nunca descienden, lo hacen los equipos y generalmente los entrenadores. Muchos de ellos seguirán en la ACB el año que viene.

-La última. ¿Cuál es la primera premisa para regresar cuanto antes a la ACB?

-Hacer un buen equipo, equilibrado, con los roles bien definidos y que asuma que va a competir en la LEB, y luego trabajar en equipo con la directiva y hacerlo con tranquilidad. El descenso debe servir de lección. Tanto yo como el Breogán hemos crecido esta temporada a pesar de bajar, el descenso es un valor añadido.