El ERTE, una salida «razonable» para el Leche Río Breogán

LUGO

ALBERTO LÓPEZ

Miguel Juane, abogado experto en derecho deportivo, entiende que la medida no es muy agresiva ni traumática

31 mar 2020 . Actualizado a las 19:29 h.

El Leche Río Breogán también ha optado por solicitar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) como escudo contra los daños colaterales de la pandemia del COVID-19. La medida está rodeada de incógnitas, tiene en vilo a los miles de aficionados del equipo lucense y los expertos en la materia la ven como una de las más «razonables» en este escenario de incertidumbre. Miguel Juane, reputado abogado especializado en derecho deportivo, considera que la fórmula no es ni muy agresiva ni traumática y despeja muchas de las dudas alrededor de un equipo que inició el curso con la aspiración de regresar a la ACB. Un escenario de ERTE al que se enfrentarán decenas de clubes gallegos medianos y grandes.

¿Qué razones debe exponer un club para solicitar un ERTE?

«En ese caso debe exponer la realidad, que existe una causa de fuerza mayor sobrevenida, imprevisible e inesperada como es la pandemia por el COVID-19, que se encuentra dentro de los hechos que se entienden como imposibilitantes no catastróficos (fuerza mayor impropia). Es un hecho evidente y notorio que la actividad de la empresa y la competición deportiva en la que participa se han paralizado».

¿En cuánto tiempo se resuelve y de qué organismo depende?

«Resuelve la autoridad laboral en un plazo de siete días. Al ser un club gallego, sin centros de trabajo fuera de nuestra comunidad, debe tramitarse la solicitud a través de la Consellería de Emprego de la Xunta de Galicia».

¿Qué porcentaje del presupuesto se puede ahorrar con esta medida?

«Si se aprueba el ERTE, el club se ahorra el 100% de las cotizaciones a la Seguridad Social, por ser una empresa de menos de 50 trabajadores, además del salario de los trabajadores, mientras dure esta medida. Sin duda, esta decisión de la suspensión temporal de los contratos laborales es menos agresiva y traumática que los despidos».

¿Cuál pasa a ser la situación laboral de los empleados?

«Se quedarían en situación de suspensión de su contrato laboral y se reanudaría una vez se levante la medida, en las mismas condiciones que tenían cuando se presentó el ERTE. Durante la vigencia de este percibirían la prestación de desempleo, hasta un 70% de su salario y con el límite legal. En cualquier caso, no se considerará consumido el tiempo que dure la percepción de esta prestación».

¿Qué pasa con las cláusulas e incentivos por objetivos, partidos jugados y demás?

«Habría que analizar cada situación individualmente, pero entiendo que quedarían en suspenso y se reanudarían una vez se vuelva a la normalidad y se reactive la competición, con lo que se generaría el derecho a percibirlas».

¿Podría reanudarse la competición?

«Sería lo deseable. Es lógico pensar que se tendría en cuenta todo lo acontecido hasta la fecha. Entiendo que habría que ponerse de acuerdo para resolver si se recuperan las jornadas o se extiende la fecha de finalización de la competición. Ante una situación tan extraordinaria habría que pensar en soluciones también extraordinarias»

¿Y si se suspende de manera definitiva?

«Tendrían que pensar una solución que ojalá fuese de consenso. No está prevista una respuesta al estilo de las carreras de motociclismo o automovilismo, en las que si se completa un tiempo de la carrera (en vueltas o en minutos), se tiene en cuenta el resultado del último paso por línea de meta. En baloncesto, como en el fútbol, la anulación de la competición parece que sería lo más justo si esta se suspende de forma definitiva. Hay muchos implicados en ascensos y descensos y no parece razonable improvisar una solución no prevista inicialmente para la resolución de la competición».