«Somos un monte de futuro»

Xosé María Palacios Muruais
XOSÉ MARÍA PALACIOS VILALBA / LA VOZ

GUITIRIZ

SUSO PENA

La comunidad de Lagostelle pretende ampliar sus actividades para así conseguir más ingresos

10 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El monte de Guitiriz, como el de otras zonas donde abunda el de régimen comunal, experimentó cambios en décadas pasadas. Uno de los más importantes fue que las comunidades recuperaron la gestión y el control de ese terreno; pero no solo de pasado vive el monte en mano común, sino que comunidades como la de Lagostelle son un ejemplo de planes de futuro.

Los asuntos tratados en la última asamblea son un ejemplo de preocupación y de atención, aunque las perspectivas también parecen más bien halagüeñas: «Hai unha previsión dos vindeiros 40 anos para ter vendas de madeira todos os anos», dijo ayer el presidente, Francisco Roca. Las ventas que pueden llevarse a cabo son de madera de pino, precisó.

 NUEVAS VÍAS

Previsión de otros aprovechamientos. La actividad relacionada con las plantaciones y con el cuidado de masas arbóreas ocupa, desde hace años, gran atención de las directivas de la comunidad de montes. La actual también se interesa por la posibilidad de abrirse a otros aspectos, como podrían ser el aprovechamiento de las setas, de las castañas o de la resina. Este último apartado incluso ha sido atendido por el Concello, que ha organizado alguna jornada sobre ese asunto.

 Para Roca, se trata de planes de futuro que hay que plasmar en un documento antes de poner en práctica. De todos modos, subraya que si se llevasen a cabo, supondrían más ingresos para la comunidad. La diversificación, detalló, siempre se dirige en esa dirección. Además de las actividades citadas como posibles de realizar próximamente, también está abierta la posibilidad de aumentar la superficie dedicada a pasto. Esa es una cuestión que la comunidad tiene presente desde hace años

 OTROS INGRESOS

Proyectos para más ganancias y de más plantaciones. La venta de madera y los alquileres de pastizales son los ingresos de los que se nutre la comunidad. Salvo uno, todos los actuales arrendatarios son comuneros. La comunidad, explicó Roca, ha aprobado que en igualdad de condiciones tengan preferencia los miembros de la entidad.

 Por otro lado, la consecución de más ganancias tendría consecuencias claras sobre la actividad de la comunidad, puesto que no se reparten fondos entre los miembros sino que los ingresos se destinan a efectuar trabajos o a reservar alguna cantidad parta el futuro.

También la realización de más plantaciones está presente en los planes de futuro de los comuneros. Está prevista, dijo Roca, la realización de repoblaciones con pino y con frondosas en unas cinco o seis hectáreas de terreno, repartidas en tres zonas.

 ESTIMACIÓN

Posibilidad de cortar 15 hectáreas al año. La actividad relacionada con la corta de madera puede intensificarse hasta abarcar 15 hectáreas por año. Las cortas suelen ser de pino y así se mantendrán a corto plazo: hay también alguna zona con castaños, pero por ahora, explicó Roca, son pequeños.

 PREVENCIÓN

Trabajos de limpieza. El monte que en Guitiriz ocupan las comunidades apenas padece el problema de los incendios porque, entre otros aspectos, suele estar limpio. Esa atención no se ha abandonado: «Niso estamos», dijo. La comunidad prevé dedicar fondos propios y otros procedentes de subvenciones para ese fin, así como para la reparación de pistas dañadas por el paso de camiones con madera.