Rozas tendrá nuevo avión para investigar

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

Carlos Castro

El INTA jubila sus dos aeronaves de experimentación y comprará un nuevo modelo

28 jul 2017 . Actualizado a las 16:08 h.

El INTA inició el proceso para jubilar a sus dos aviones de investigación el C-212-NS-301, que está dedicado a las pruebas en la atmósfera y el C-212-NS-270, que utilizan para la teledetección y que vuela por toda Europa. Ambos fueron fabricados en el año 1983 y pertenecen al Instituto Nacional de Tecnología Aeroespacial desde 1997, en que se los compró a Correos, que los usaba para trasladar correspondencia y paquetes postales a Canarias. Las dos aeronaves sobrevolaron el cielo de Rozas en numerosas ocasiones en los últimos meses para recoger datos para la elaboración de diferentes estudios, entre ellos uno que pretende identificar que virus y bacterias viajan en el aire.

A partir del año 2020 ambos aviones serán sustituidas por otro con más autonomía de vuelo -nueve horas frente a seis- más amplio, con posibilidades de llevar más peso, sensores y personal para controlar los datos que se recogen, y su base de operaciones será el CIAR, en el aeródromo lucense. En estas instalaciones está previsto construir un segundo hangar para dar cobijo a la nueva adquisición y al resto de las aeronaves de experimentación que forman parte de la Plataforma Aérea de Investigación (PAI), del INTA.

Saber qué transporta el aire

El avión que realiza las pruebas en la atmósfera aterrizó el viernes en Rozas para participar en el Critérium Aeronáutico. Los profesionales que trabajan con él, entre ellos la directora del CIAR, Neves Seoane, física de la atmósfera y José Antonio Gómez, responsable del equipo de aviones de investigación del INTA, explicaron a los lucenses qué labores desempeña la aeronave y las misiones que tiene encomendadas.

El INTA exhibió también en estos últimos días en Rozas el motovelero Stemme y dos aviones no tripulados: SIVA y ALO. Los cuatro, junto al no tripulado Milano y al otro modelo tripulado el C-212- NS-270, que ya estuvo en el aeródromo lucense en otros criterios, forman parte de la Plataforma Aérea de Investigación del INTA.

El Milano, según explicó Neves Seoane, realizará su primera prueba de vuelo en el mes de septiembre en el aeródromo lucense. La responsable del CIAR explicó a su auditorio que el primer vuelo del Atlante, el avión no tripulado de la compañía Cassidian, lo realizaron en Rozas y utilizaron este avión del Inta. En este vuelo, según Seoane, detectaron cinco fallos críticos.

La misma aeronave la usan los alumnos del máster de ensayos de Madrid. Estos profesionales son los prueban los aviones antes de que empiecen a volar.

Avión presurizado

El INTA, según Gómez, decidió cambiar sus aviones porque ya tienen problemas para encontrar repuestos. El Ministerio de Defensa aprobó la propuesta el pasado 16 de marzo, trámite que puso en marcha la maquinaria para buscar el modelo que sustituirá a las dos aeronaves que están en uso en estos momentos.

La compra del avión saldrá a licitación, sobre la base de las necesidades detectadas, no solo por el personal del INTA, sino también de las empresas para las que trabaja. La inversión prevista en el aparato y en los equipos es de 35 millones de euros y parte será financiada con fondos europeos. «Estamos -señaló Gómez- especificando e identificando las necesidades de los usuarios, tanto presentes como futuras». Tienen previsto que esté en vuelo en el año 2020 y que permanezca en activo hasta el 2050. Esta fecha está estimada en función de la vida útil de los dos aviones que quieren jubilar.

Buscan un modelo turbohélice, más grande, presurizado -los dos actuales, a partir de los 10.000 pies sus tripulantes necesitan usar mascarillas de oxígeno- y con más instrumentación.

La directora del CIAR, que participa en los estudios para identificar los virus y las bacterias que viajan por el aire, explicó a los visitantes el interés del INTA en conseguir campañas. Según dijo, de ello depende el 40% de su salario. Trabajaron, entre otros, para el Canal de Isabel II.

La inversión. Supondrá 35 millones, entre el aparato y la dotación tecnológica. Una parte la financiará la Unión Europea.

Sustituye a dos aeronaves de 1983. Antes de que las comprara el INTA y las preparada como laboratorios, pertenecían a Correos y volaban con cartas y paquetes a Canarias.

Los profesionales

En la imagen: Neves Seoane, directora del CIAR; Luis Otero, mecánico del INTA y José Antonio Gómez, que es el responsable de la PAI (Plataforma Aérea de Investigación)

El Aeroclub de Lugo dio por finalizado ayer el Critérium Aeronáutico con las últimas exhibiciones y saltos en paracaídas. Durante todas estas jornadas, que comenzaron el viernes, hubo, entre otras actividades, un campeonato de drones, que fue la gran novedad de este año. Tiene significado especial para unas instalaciones que se dedicarán a los vehículos no tripulados.