Política, el arte del entretenimiento a base de problemas sin resolver

enrique g. souto lugo / lA voz PULSO LUCENSE

LUGO CIUDAD

19 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace muchos años que Anatole France puso por escrito que «gobernar siempre quiere decir hacer descontentos». Hay gobiernos que logran convertir tan inevitable consecuencia de la tarea de gobernar en el leitmotiv de su gestión, que es lo que le pasa al que preside la socialista Lara Méndez. Es lo que trae como consecuencia la inacción, o, para ser justos, la acción sin rumbo (ORA, PGOU, servicios sin contrato, etcétera). Hasta tal punto es así que hay quien cree que el gobierno/desgobierno de Lugo obedece a una medida estrategia en la línea del aviso de Ezra Pound: «Gobernar es el arte de crear problemas con cuya solución se mantiene a la población en vilo».

En el mundo al revés que es la política lucense, los primeros perjudicados por el gobierno local han sido los dos partidos que apoyaron la investidura de la alcaldesa. Lugonovo, ninguneado Santiago Fernández Rocha por Lara Méndez hasta llevarlo a la renuncia, vive una crisis de consecuencias impredecibles. Todo es descontento y mohína en la marea lucense. Al Bloque, Méndez ha conseguido reducirlo a un papel absolutamente menor y sorprendente en esta organización en el ejercicio de la oposición. La otra izquierda municipal (ACE) juega a algo distinto de la política local pura y dura; lo suyo (lo del PCE), como lo de la Iglesia, son los tiempos largos y el paso por el Concello no es más que eso, un paso, aderezado ocasionalmente por alguna teatral puesta en escena.

El portavoz del gobierno local, Miguel Fernández, dejó entrever en ocasión reciente que en los últimos meses del mandato se verá, traducido en obras, el resultado de la gestión municipal. Y es seguro que será así; no tanto por el número de proyectos y su relevancia, como por contraste con lo que fueron los dos primeros años de mandato. El PP lo intuye, pero es incapaz de ejercer el papel que corresponde en la oposición al grupo que tiene más concejales. Solo el profesional trabajo político del delegado territorial de la Xunta, José Manuel Balseiro, logra dar visibilidad a los populares; él es el motivo de preocupación en las filas socialistas, no los ediles del PP. Y mucho menos los del Bloque y Lugonovo, que tanto les ayudan a gobernar según Pound.