«Fuera de mi cuerpo y sin entender nada», así despertó una de las chicas a la que pudieron dar burundanga en Lugo

Tania Taboada

LUGO CIUDAD

OSCAR CELA

La joven cree que alguien le echó algo en la bebida ya que nunca tuvo esa pérdida de memoria

03 may 2019 . Actualizado a las 15:26 h.

Dos chicas que salen de fiesta, que en mitad de la noche pierden la noción del tiempo y que no recobran la conciencia hasta horas más tarde. Se despiertan mareadas y totalmente desubicadas: «Fuera de mi cuerpo y sin entender nada», relató una de ellas. Es lo que ocurrió el pasado fin de semana en Lugo ciudad. En mitad de la noche, alguien les ha suministrado alguna sustancia ? posiblemente Burundanga o algo semejante? con la posible intención de abusar sexualmente (en el caso de una) y de robarle, (en el caso de la otra). Son dos casos aislados entre sí pero con ciertas similitudes.

Una de las chicas tiene 25 años. Es natural de Lugo y tiene pareja. La otra tiene 27. Nació en Vigo pero vive en la ciudad de la Muralla. También tiene novio. Los hechos de la primera sucedieron el viernes. Los de la segunda, el sábado. Ambas salieron de fiesta. La primera por el centro de la ciudad. La segunda se por la Plaza de Augas Férreas y Calle Tui. Sobre las 11.00 horas del sábado, la de 25 años despertó desnuda, en la cama de una pensión, situada en la Praza Mártires de Carral. Un hombre de nacional extranjera estaba a su lado y no lo conocía de nada. Se vistió como pudo y abandonó el lugar. Ya en la calle, unos caminantes le dejaron el teléfono móvil y llamó a su novio. Ambos acudieron a Comisaría y en cuestión de horas los agentes detuvieron a dos rumanos de 38 y 43 años en calidad de investigados por una supuesta agresión sexual a la chica. Tras declarar en el juzgado, los dos arrestados fueron enviados a prisión comunicada y sin fianza, con medida de alejamiento y prohibición de comunicación con la denunciante.

Segunda declaración 

Con respecto a la joven de 27 años hay alguna modificación en su segunda declaración. La chica amanece entre las 12.00- 13.00 horas del domingo circulando en un coche blanco con dos hombres con los que no tiene relación y con los que no inició la fiesta. Manifestó que comenzó la noche en un local de la Praza de Augas Férreas con cuatro chicos con los que fue a trabajar a Castroverde de extra como camarera, con los que estuvo hasta las tres y media de la madrugada. A esa hora decidieron cambiar a un pub de la calle Tui y fue aquí cuando tres de los chicos se fueron. Se quedó con uno de ellos y con un amigo de este. Ambos son naturales de Sarria.

Siguiendo el relato de la chica, en el pub de la calle Tui todo fluía con normalidad hasta que a las cuatro va al baño. Pidió una copa, bailó con el amigo de su compañero, charlaron en la barra... pero fue ir al aseo y no acordarse de nada más de lo que pasó en la noche. Se despertó al día siguiente en los asientos traseros de un coche que guiaba un chico que conocía de vista (de verlo por la calle Marina Española). De copiloto viajaba otro hombre, de unos 50 años y que no conocía de nada. La joven, que se sentía mareada y con temblor de rodillas, percibió que le faltaban sus pertenencias, a lo que uno de ellos le respondió que no se preocupara porque estarían en el local donde perdió la noción del tiempo. Le dio la impresión de que estos hombres habían estado con ella también en este local.

A continuación, los tres acudieron a una vivienda de Fingoi, donde se celebró una comida familiar y donde estuvieron hasta las 18.00 horas, que le pidió a uno de los chicos que la llevara a su casa. Le faltaba la ropa interior inferior y un calcetín. Ya en su vivienda, contó a su pareja lo sucedido y tras descansar un rato se dirigen al HULA, desde donde reclaman a la Policía Nacional. La chica insiste en que solo consumió alcohol y manifestó que desconoce de quien le echó algo en la bebida, puesto que nunca tuvo esos períodos de pérdida de memoria. Denunció también que le falta el teléfono móvil, una mochila, las llaves de casa y una cazadora, donde podría tener guardado su terminal.